3.336 militares en 21 misiones en el exterior

En Irak, Líbano, Colombia, Australia, Mali o Letonia, las Fuerzas Armadas participan en operaciones en los cinco continentes.

Tres militares inauguraron en 1989, en Angola, la participación de las Fuerzas Armadas en operaciones de paz. 28 años después, 112 efectivos han sido los últimos en sumarse, en Portugal, a una misión en el exterior. Desde entonces, más de 150.000 han participado en alguna de las cerca de 50 operaciones en las que ha intervenido España, las cuales han ido cambiando con el tiempo, dejando atrás las clásicas «guerras» para dar paso a las misiones de apoyo y adiestramiento. Ese «enseñar a pescar » que repetía el ex ministro Pedro Morenés. En este tiempo, la presencia de españoles en el exterior ha ido aumentando hasta llegar a la actualidad, con un despliegue sin precedentes que esta semana alcanzó los 3.336 militares en 21 misiones simultáneas en los cinco continentes. Aunque el máximo de uniformados fuera de territorio nacional sigue siendo el del año 2003, con 3.600. Eso sí, en sólo 4 misiones: Kosovo, Bosnia, Afganistán e Irak.

Duró poco, porque en 2004 el Ejecutivo marcó un límite de 2.400 desplegados, que aumentó a 3.000 en 2005. Carme Chacón lo eliminó en 2008, estableciendo un tope no oficial de unos 7.700, marcado por la operatividad y las rotaciones. Y desde 2014, el núcleo de la Fuerza expedicionaria se sitúa en 15.000. Hoy, los militares españoles adiestran a soldados malienses o iraquíes, protegen a los países bálticos, rescatan a inmigrantes en el Mediterráneo, cooperan y se entrenan con naciones aliadas o luchan contra los incendios en Portugal. 21 misiones, por tierra, mar y aire, con distintas tareas y en escenarios dispares que suponen, además, todo un importante reto logístico.

La más numerosa es la de Líbano, con 620 efectivos que patrullan la tensa «Blue line» para evitar enfrentamientos entre Israel y Hizbulá. No muy lejos, en Irak, 463 militares y guardias civiles adiestran a sus Fuerzas Armadas para que sean capaces de enfrentarse a los yihadistas, mientras que 338 patrullan el Cuerno de África para evitar los ataques de piratas somalíes.

En el norte de Europa, 310 efectivos acaban de incorporarse a la «Presencia Avanzada Reforzada» de la OTAN en Letonia, desde donde protegen, con blindados como los Leopard, a los países bálticos de Rusia. Eso por tierra, porque desde el Aire hacen lo propio 128 militares y cinco cazas basados en Estonia.

Más dramática es la tarea de los 261 militares que luchan contra las mafias de la inmigración en el Mediterráneo en la misión «Sophia» de la UE. España contribuye con una fragata y un avión. Un mar que también protegen 119 marinos en la misión «Sea Guardian» de la OTAN contra el terrorismo.

Acabando su misión en el Mediterráneo y en el Atlántico están los 251 tripulantes de la «Blas de Lezo» en la Agrupación Naval Permanente nº2 de la OTAN, una de las unidades de primera respuesta aliada. Y otra fragata, la «Cristóbal Colón» y sus 185 efectivos, también terminan su despliegue en Australia en una misión de cooperación y adiestramiento entre ambas marinas. Bajo bandera de la OTAN hay 149 militares en Turquía que, con una batería de misiles Patriot, protegen a este país de ataques desde Siria.

La siguiente misión más numerosa está en África, concretamente en Mali, donde 130 efectivos adiestran al Ejército del país. Muy cerca, en Dakar, los 61 militares del Destacamento Mamba dan apoyo aéreo a las operaciones de Francia en el Sahel. Una misión similar a la que otros 45 uniformados realizan desde Gabón en apoyo a las tropas francesas en República Centroafricana, país en el que 19 españoles del Eurocuerpo adiestran a sus Fuerzas Armadas. África es clave para España y, por ello, otros 59 militares han instruido al Ejército de Cabo Verde, 34 al de Senegal o 16 al de Somalia.

Fuera de este continente hay 19 en Afganistán asesorando a sus Fuerzas Armadas y otros 3 haciendo lo mismo en Bosnia. Y en Colombia, 14 militares verifican que se cumpla el proceso de paz. Por último, la misión más reciente ha tenido lugar en Portugal, donde esta semana 100 efectivos de la UME, 12 del Ejército del Aire y cuatro aviones luchaban contra los incendios.

Ese carácter expedicionario no se queda ahí, pues hay también 170 militares que se adiestran en Venecia en un ejercicio multinacional de cara a la participación, en 2018, en la Fuerza de Muy Alta Disponibilidad de la OTAN. Y en el marco de la Europa de la Defensa, 2.500 militares estarán en alerta desde el 1 de julio como líderes de la Fuerza de Respuesta Rápida de la UE.