Defensa reconoce "dependencia tecnológica" de Israel y anuncia planes para "desconectarse"

En medio de un escenario internacional marcado por la crisis en la Franja de Gaza y el debate político en España sobre la imposición de un embargo de armas a Israel que Pedro Sánchez pretende también liderar en el resto de la UE, el Ministerio de Defensa ha reconocido la dependencia que existe con Israel en materia tecnológica y la complejidad que supone desvincularse. Y es que, la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, ha admitido este viernes que algunos programas industriales españoles mantienen "dependencia tecnológica" de productos fabricados por empresas israelíes, aunque ha asegurado que ya se están diseñando planes para superar esta situación, informa Ep.

Estas declaraciones se produjeron en un foro organizado por Nueva Economía Fórum, justo después de que el Congreso aprobara la tramitación de un proyecto de ley impulsado por Sumar, Podemos y el BNG para imponer un embargo de armas a Israel en respuesta a los ataques y las matanzas en la Franja de Gaza.

Valcarce condenó con firmeza la "invasión" de Gaza y las "masacres" de civiles palestinos, y manifestó el "respeto" del Ministerio de Defensa hacia la tramitación de esta norma, calificándola de "muy necesaria".

"Dependientes"

Preguntada sobre la viabilidad de aplicar un embargo de armas al Estado hebreo, la secretaria de Estado recordó que España paralizó el comercio de armamento con Israel el 7 de octubre de 2023, fecha en la que comenzó la ofensiva en los territorios palestinos tras la masacre perpetrada por Hamás. "Ninguno, absolutamente ninguno", dijo. No obstante, reconoció que "algunos programas en curso tienen dependencias tecnológicas de alguna empresa de Israel", sin entrar en detalles específicos. No obstante, garantizó que Defensa está diseñando planes para lograr la "desconexión" tecnológica del Estado israelí.

En este sentido, destacó el plan industrial aprobado por el Gobierno, dotado con más de 10.400 millones de euros, que busca alcanzar una autonomía estratégica y soberanía tecnológica, facilitando así la independencia de Israel y otros países en materias sensibles. "En cuestiones tecnológicas tenemos que llegar al objetivo cero, y ese objetivo solo se consigue con el plan que estamos implementando de desconexión", subrayó Valcarce. Desde Defensa ya se había apuntado que cumplir con un embargo efectivo sobre la compraventa de armamento y material de defensa a Israel sería complicado, dado que gran parte de la tecnología en áreas clave como la ciberseguridad o la inteligencia artificial se desarrolla allí. Además, se teme que la ley pueda ser sorteada en la práctica.

Uno de los proyectos que ya se ha visto afectado es el de la modernización del Sistema Conjunto de Radio Táctica (SCRT), un programa de modernización que busca integrar nuevas bandas de frecuencia en los vehículos y equipos de comunicación del Ejército de Tierra. Sin embargo, el producto original fue desarrollado por la compañía israelí Elbit System.