El TSJC rechaza todo tipo de declaración independentista

Después de menos de 24 horas de la comparecencia del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en la que se anunció la independencia e ipso facto se anuló la misma, la sala de gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) emitió una declaración en la que, entre muchas otras ideas, reiteró su «compromiso de fidelidad y sistema del sistema constitucional». Sin margen para desobediencias.

Se trató de una nueva confirmación de la alineación del TSJC con el orden judicial, concretamente con el Tribunal Constitucional (TC). «La fidelidad al sistema constitucional de los jueces que conformamos el Poder Judicial en Cataluña es nuestra manera, la única posible, de comprometernos en la defensa activa de los valores, de los derechos y de las libertades de todos».

El punto más importante del comunicado del TSJC hizo referencia a la pseudo declaración unilateral de independencia de Puigdemont. Dijo el comunicado que «la sala de gobierno quiere reafirmar de forma inequívoca que solo la norma vigente, conforme a la Constitución y a lo dispuesto por el TC , puede ser fuente aplicativa del derecho y presupuesto de todas y cada una de las decisiones judiciales. Y ello comporta que ni la ley de Transitoriedad, suspendida por el TC, ni ninguna declaración formal o aformal, implícita o explícita de independencia desplieguen efecto jurídico alguno».

Por último, el TSJC quiso «destacar que la necesaria obediencia a la ley que nace y se funda en el sistema constitucional, en sus valores y en los derechos y libertades que garantiza, es lo que nos permite a todos y a todas reconocernos como miembros iguales de una comunidad política plural comprometida con la paz y el progreso».

El presidente del TSJC, Jesús María Barrientos,acordó el lunes retirar a los Mossos d’Esquadra el mando del despliegue de seguridad en el Palacio de Justicia de Barcelona, sede de este tribunal, y de la Audiencia de Barcelona, y decidió transferirlo a la Policía Nacional.

Según la orden dictada por Barrientos, el Cuerpo Nacional de Policía debe destacar y desplegar dentro del Palacio de Justicia, en su entorno y perímetro los efectivos que se estimen imprescindibles para su nuevo mandato. Los agentes de este cuerpo colaborarán con los Mossos.