23J

Esquerra echa el freno y ahora deja en el aire su apoyo al PSOE para presidir el Congreso

Rovira asegura que los socialistas no pueden "dar por descontados los votos de ERC" tras haber vetado el catalán o haberse negado a investigar el espionaje de Pegasus

GRAF8831. MADRID, 23/03/2018.- fotografía de archivo del 19 de febrero de 2018 de la líder independentista catalana y número dos de ERC (republicanos de izquierda), Marta Rovira, que no acudió hoy a su comparecencia ante el Tribunal Supremo y decidió huir de España, según comunicó ella misma en una carta a la militancia de su partido. Rovira estaba citada hoy por el juez Pablo Llarena, que lleva en en el Supremo el caso sobre la independencia de Cataluña, quien iba a comunicarle su procesamiento y estaba previsto que decidiera si tomaba contra ella medidas cautelares, como la prisión preventiva. La política catalana, junto a otros destacados líderes independentistas, está imputada por los presuntos delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos. "El exilio será un camino duro, pero es la única forma que tengo de recuperar mi voz política", afirma Rovira en esa misiva. EFE/Archivo/Javier Lizón
GRAF8831. MADRID, 23/03/2018.- fotografía de archivo del 19 de febrero de 2018 de la líder independentista catalana y número dos de ERC (republicanos de izquierda), Marta Rovira, que no acudió hoy a su comparecencia ante el Tribunal Supremo y decidió huir de España, según comunicó ella misma en una carta a la militancia de su partido. Rovira estaba citada hoy por el juez Pablo Llarena, que lleva en en el Supremo el caso sobre la independencia de Cataluña, quien iba a comunicarle su procesamiento y estaba previsto que decidiera si tomaba contra ella medidas cautelares, como la prisión preventiva. La política catalana, junto a otros destacados líderes independentistas, está imputada por los presuntos delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos. "El exilio será un camino duro, pero es la única forma que tengo de recuperar mi voz política", afirma Rovira en esa misiva. EFE/Archivo/Javier LizónJavier LizónAgencia EFE

De aquí al jueves pueden pasar muchas cosas en la política española: cuando parecía que el PSOE tenía ya hecho el apoyo de ERC para presidir el Congreso, los republicanos han dado un paso atrás y han advertido de que sus votos no están aún garantizados. De esta manera, los socialistas están ahora todavía más lejos de disponer de la fuerza suficiente para presidir el Congreso, un cargo muy importante para, entre otras cosas, marcar luego los tiempos de la investidura. Sin el apoyo de ERC ni de JxCat confirmado, el PSOE tiene cuatro días por delante para tratar de convencer a ambas formaciones.

En un mensaje a través de las redes sociales, la secretaria general Marta Rovira ha avisado que el PSOE no puede "dar por descontados los votos de ERC". "Ni a una Mesa del Congreso que ha vetado el catalán, que no ha dejado investigar el espionaje de Pegasus o que ha encallado la tramitación de la ley de amnistía", ha señalado Rovira, dando a entender también que va a encarecer mucho todo acuerdo con el PSOE.

Rovira, que forma parte del ala dura de ERC, alza la voz para dejar en el aire el apoyo de los republicanos al PSOE. Y es que Esquerra ha perdido mucho protagonismo en los últimos días ya que todas las miradas se han posado en JxCat y también quiere hacerse valer: por eso, ha reculado ahora tras dar por hecho el jueves su apoyo al PSOE para la Mesa del Congreso. El PSOE va a tener que lidiar con la voracidad de ERC y JxCat para conseguir el mejor acuerdo político posible y los republicanos ahora ponen sobre la mesa temas como el catalán o Pegasus.

También cabe resaltar que quien está negociando en Madrid, hasta ahora, es Teresa Jordà, que también forma parte del ala dura de ERC, como Rovira, lo que significa que los republicanos han virado de estrategia y han dejado aparcados a perfiles más proclives a los acuerdos en el Congreso, como Gabriel Rufián. Jordà o Rovira también son perfiles que podrían facilitar la construcción de un acuerdo con JxCat para actuar coordinadamente en el Congreso, ya que se hace mucho más difícil el entendimiento entre Rufián y los posconvergentes por los enfrentamientos que han tenido. Los republicanos no cejan en su empeño por aliarse con JxCat en Madrid.

En estos momentos, quien más apoyos tiene garantizados para presidir el Congreso es el candidato del PP, aunque sigue sin desvelarse quién puede optar al cargo. En las filas populares tienen muchos números tanto Ana Pastor como Carmen Navarro, que ya formaron parte de la Mesa del Congreso en la legislatura pasada. Ahora mismo, el PP cuenta con 171 apoyos garantizados y está pendiente qué va a hacer Coalición Canaria. En todo caso, son más de los que tiene el PSOE.

Los populares, además, podrían jugar con la baza del Senado: ahí tienen mayoría absoluta y ostentarán la presidencia y cuatro de los siete miembros de la Mesa. Además, tienen margen para ceder un puesto a alguna minoría: por ejemplo, al PNV, que ya tuvo un miembro en la pasada legislatura en la Mesa. Los nacionalistas vascos han perdido cinco senadores (han pasado de nueve a cuatro), pero podrían mantener un puesto en la Mesa si los populares se lo ceden como contrapartida para negociar el Congreso y la investidura de Alberto Núñez Feijóo.

Cabe recordar que el Senado tiene una gran importancia esta legislatura porque puede actuar como "semicontrapoder" del Congreso: puede ralentizar la tramitación de las leyes que procedan de la Cámara Baja si llevan el sello de un Gobierno del PSOE con los socios independentistas, aunque tampoco tiene capacidad para tumbarlas.

La Mesa del Congreso, en este sentido, puede tener más fuerza, ya que ahí sí hay capacidad para dejar leyes en el limbo: quien ostente la mayoría, puede modular los tiempos a la hora de tramitar las iniciativas legislativas y puede impedir que vayan a pleno (bajo el mecanismo de la ampliación de las enmiendas), tal y como ocurrió en la pasada legislatura con PSOE y Podemos.

Esta legislatura, el Congreso pasará a tener once partidos políticos, cinco menos que en la anterior, lo que puede facilitar algo más los acuerdos políticos. No obstante, el PSOE lo tiene peor que el PP porque necesitaría contentar a siete formaciones políticas, con los esfuerzos que ello conlleva: más aún teniendo en cuenta que PNV y Bildu pugnan entre sí por obtener el mejor botín y todo apunta a que ERC y JxCat reproducirán el mismo esquema que las formaciones vascas.

Sumar

En paralelo a las palabras de la secretaria general de ERC, que sigue huida en Suiza, Yolanda Díaz también se ha pronunciado en un acto en O Carballiño (Ourense) y ha rechazado de forma velada que el PNV obtenga la presidencia del Congreso tal y como ha propuesto Fernando Clavijo, presidente de Canarias y líder de Coalición Canaria, en una entrevista en "La Vanguardia". ""Lo que tiene sentido es que el órgano de máxima importancia sea acorde a lo que votó la ciudadanía. Trabajamos para tener una mesa progresista", ha afirmado.

Esta afirmación de la vicepresidenta tercera en funciones del Gobierno contradice, en cierta medida, lo que había señalado días atrás Joan Baldoví, de Compromís, que forma parte de Sumar. El dirigente valenciano apeló a la generosidad del PSOE para ceder la presidencia del Congreso a algunos de los partidos de izquierda que pretenden dar apoyo a la investidura de Sánchez, como reflejo de la "pluralidad de los resultados".

En todo caso, Díaz, muy prudente, se ha limitado prácticamente a hacer un llamamiento a los partidos a llegar a un acuerdo de inmediato para conformar un "gobierno progresista". "Nadie entendería que estas elecciones fueran un retroceso", ha señalado, en referencia a su rechazo a que acabe formándose un gobierno de derechas.