España sigue en nivel 4 de alerta, pero refuerza zonas prioritarias

El ministro del Interior hace un llamamiento a la calma y pide confiar en las Fuerzas de Seguridad.

El Gobierno acordó ayer mantener el actual nivel de alerta antiterrorista, el 4, pero reforzado en algunas áreas, después de analizar los riesgos tras los atentados simultáneos en París, que causaron al menos 127 muertos y 180 heridos, según informó el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.

El ministro presidió ayer la reunión del Pacto antiyihadista y asistió también a la reunión de la Comisión de Seguridad Nacional. El nivel de alerta, ya muy elevado, se mantiene, pero reforzando las medidas de seguridad en ámbitos y áreas sobre los que el titular de Interior guardó la reserva por «prudencia». Fernández Díaz recordó que España ya cuenta con un nivel muy elevado de alerta, que se decretó tras los atentados de junio en Francia, Túnez y Kuwait, y también explicó que la propuesta de la mesa de valoración fue unánime. Todos los profesionales de los servicios especializados en la lucha antiterrorista consideraron que debe mantenerse el nivel 4, «si bien reforzado en algunos ámbitos». El nivel 4, de un máximo de 5, supone un riesgo alto de atentado. El nivel 5 de alerta terrorista supone recurrir en algunos casos a la colaboración del Ejército. Seguir en el nivel de alerta 4 implica un fuerte despliegue de agentes en los puntos estratégicos del país, como aeropuertos, estaciones de tren y centrales hidroeléctricas o centros de telecomunicaciones. También supone activar todas las unidades de las fuerzas policiales dedicadas a la prevención, investigación e información de la lucha antiterrorista. Una batería de medidas que se complementará con una mayor presencia de las Fuerzas de Seguridad en las calles, aunque no se movilizará a los militares. Fuentes de la lucha antiterrorista precisaron que probablemente el refuerzo de los controles se produzca sobre todo en los medios de transporte. El ministro, no obstante, hizo un llamamiento a la calma de la sociedad española. Interior no tiene ningún dato que permita pensar que los yihadistas detenidos en España en los últimos meses tengan algún tipo de vinculación con quienes cometieron el viernes los atentados de París. En concreto, el ministro se refirió así a los tres detenidos el pasado 3 de noviembre, en el poblado chabolista madrileño conocido como el «supermercado de la droga», de la Cañada Real. Un arresto que supuso un «salto cualitativo» en España, pues ya no sólo se dedicaban a captar, adoctrinar y radicalizar, sino que planeaban «ejecutar atentados». La cifra de detenidos desde los atentados de 2004 en Madrid se eleva a 629 presuntos yihadistas –169 en esta última legislatura–, y algunos de ellos estaban ya en disposición de cometer acciones similares a la de París. El ministro también confirmó ayer la disposición del Gobierno a abrir el pacto contra el yihadismo a los partidos emergentes. El acuerdo, suscrito por el PP y el PSOE el pasado febrero, incluyó una reforma del Código Penal, según la cual los terroristas que cometan atentados serán condenados a la nueva pena de prisión permanente revisable, asimilable a la cadena perpetua.

El poder político se movilizó con contundencia en repuesta al brutal atentado de París. Y también las Fuerzas de Seguridad del Estado para coordinar la respuesta a los ataques. A la reunión del Consejo de Seguridad en Moncloa asistieron ocho ministros –entre ellos los de Interior, Justicia y Defensa–, tres secretarios de Estado, el director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, y el jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), el almirante general Fernando García Sánchez. En paralelo, en el Ministerio del Interior se reunió la citada comisión de evaluación del riesgo terrorista. Fernández Díaz contactó ya el viernes con su homólogo francés para coordinar la información y estudiar la situación creada por la cadena de atentados ocurrida en París.

-Consulado de París: + 33 615 938 701

-Emergencia Consular (MAEC): +34 91 379 97 00