Iglesias y Sánchez mantienen contactos de «baja intensidad» ante la ronda del Rey

Las conversaciones recaen en fuentes extraoficiales de ambos partidos entre las que existe mejor sintonía y un clima de confianza. Podemos estudia lanzar una oferta «de última hora» al PSOE para que vire en su estrategia y acepte explorar la vía de izquierdas

De cara a la galería los puentes están rotos, pero fuera de los focos los contactos no se han interrumpido. Aunque el PSOE defiende en público que «el tiempo de las ofertas y las contraofertas ha terminado» y que ahora le corresponde a Podemos hacer un gesto que propicie el acercamiento, fuentes cercanas al secretario general reconocen que Pedro Sánchez no tira la toalla y que mantiene «la puerta abierta» a cualquier avance que pueda registrar la negociación. Más, si cabe, en las horas decisivas que transita la gobernabilidad de España, un tiempo de descuento hasta que el martes el Rey Felipe VI –árbitro en el proceso de consultas– decida si propone un nuevo candidato a la investidura o pita el final del partido.

A pesar de la tan cacareada transparencia de las negociaciones, con «luz y taquígrafos», lo cierto es que el acercamiento entre PSOE y Podemos se ha ido fraguando a fuego lento, en la penumbra y de forma paralela a las estrambóticas salidas de tono y de las mesas negociadoras de la formación morada. «La discreción es la única forma de que prosperen las conversaciones», reconocen fuentes del gabinete socialista. El patrón que impera ahora es el mismo que siguieron Íñigo Errejón y Rodolfo Ares antes del encuentro de sus líderes en Semana Santa y de forma previa a la reunión a tres con Ciudadanos, un modus operandi similar al sigilo que mantuvieron también Xavier Domènech y Miquel Iceta cuando se reunieron para tratar de desencallar el tema catalán y desalojarlo de la mesa de Madrid. Para lograr estos avances se recurre, en ocasiones, a fuentes extraoficiales, representadas por personas de distintos niveles territoriales de ambas formaciones entre las que existe mayor sintonía y confianza que a nivel nacional. Sánchez e Iglesias apenas cruzan un par de mensajes.

A pesar de que la versión oficial del PSOE es que no hay previstos movimientos negociadores para los próximos días, fuentes consultadas por LA RAZÓN destacan que existen continuos contactos de «baja intensidad» entre ambas formaciones para lograr un entendimiento antes de que expire el plazo. En este sentido, el fin de semana se antoja crucial para impulsar cualquier tipo de iniciativa al respecto, ya que los líderes de las fuerzas con mayor representación parlamentaria acudirán el martes a Zarzuela y deberán comunicar, entonces, al Rey la posibilidad o no de articular una mayoría que permita evitar la repetición electoral.

Para avanzar en esta vía, desde el entorno de Podemos se desliza la posibilidad de que la formación de Pablo Iglesias realice durante los próximos días una oferta «de última hora» a Sánchez con el objetivo de que el PSOE vire en su estrategia y acepte explorar la vía de izquierdas. En Ferraz no entran a comentar esta casuística, aunque no la desechan. «Si Iglesias nos quiere llamar para decir que se abstiene, estaríamos encantados», reconocen. No obstante, puntualizan que la alianza rubricada con Albert Rivera es «inamovible». «En ningún caso la vamos a dejar de lado», reiteran fuentes del entorno del secretario general. Por su parte, Ciudadanos consume las horas con la esperanza de que su socio no le abandone y con la incertidumbre de que si la oferta de Podemos es suficientemente tentadora, Sánchez pueda buscar la ruptura moderada de su acuerdo de 131 escaños.

En las horas decisivas para evitar la repetición electoral las presiones se suceden. Desde el entorno socialista se apunta a que el PSOE debería abstenerse y permitir que gobierne el PP si tras el 26-J los resultados vuelven a dibujar un país ingobernable. Mientras que desde la izquierda, Podemos e IU ya sueñan con el «sorpasso» a los socialistas y buscan las fórmulas para articular una confluencia al gusto de ambos partidos. El objetivo de ambos bloques es conseguir hacer ver a su interlocutor la necesidad de entenderse, una forma de calibrar los riesgos de volver a las urnas. Los primeros podrían perder la hegemonía de la izquierda, los segundos cargarían con la responsabilidad de «perpetuar» al PP una legislatura más al frente de La Moncloa.

Los obispos piden a Rajoy y Sánchez que se comuniquen más allá de twitter

Los obispos españoles han pedido a los políticos como Mariano Rajoy y Pedro Sánchez que se comuniquen con más de los 140 caracteres que permite Twitter y recordaron a las formaciones políticas que la sociedad española no puede estar «indefinidamente» en un estado de «provisionalidad». Si bien, prefieren no hacer previsiones sobre si habrá nuevas elecciones. «No podemos estar indefinidamente en un estado de indefinición y de provisionalidad», advirtió el portavoz y secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo.