Los líderes iberoamericanos se vuelcan con Don Juan Carlos

El Rey Juan Carlos llegó a Colombia relajado, a sabiendas de que en el país caribeño encontrará muchos amigos latinoamericanos de los que podrá despedirse. Y es que, aunque los líderes del continente vienen para asistir hoy a la toma de posesión del presidente Juan Manuel Santos, muchos aprovecharán la ocasión para poder estrechar la mano del monarca por última vez. El éxito de asistencia de esta convocatoria se debe, en parte, a la presencia de Don Juan Carlos. De hecho, según han confirmado a LA RAZÓN fuentes cercanas a la Casa Real, Don Juan Carlos se habría mostrado personalmente interesado en acudir a la ceremonia.

Éste es el primer viaje oficial del Rey al extranjero desde que el pasado 2 de junio abdicó en su hijo, el Rey Felipe VI. Le acompaña el secretario de Estado de Cooperación Internacional para Iberoamérica, Jesús Gracia.

Recibido con todos los honores, su agenda se encuentra cargada. Ayer visitó la academia Wayra de la empresa Telefónica, que busca apoyar proyectos de emprendedores y de innovación. Posteriormente, sostuvo una reunión con el presidente Juan Manuel Santos y con la canciller, María Ángela Holguín. Durante el encuentro, hablaron del proceso de paz que el mandatario ha emprendido con las FARC. Conversaciones parecidas a las que el monarca mantuvo con otros presidentes colombianos.

Como con el ex presidente Andrés Pastrana, quien también intentó negociar con la guerrilla a finales de los años 90. O Álvaro Uribe, con el que guarda una grata relación. De hecho el actual senador recibió el premio «Libertad Cortes de Cádiz», en el año 2009, gracias a la intermediación de Don Juan Carlos.

En la pasada noche, el Rey Juan Carlos asistió, además, a la cena protocolaria del presidente con otros jefes de Estado. Durante la velada, el soberano fue homenajeado por el anfitrión y sus colegas. En la toma de posesión del presidente Santos también estarán presentes otras 73 delegaciones internacionales, entre las que se cuentan once jefes de Estado y primeros ministros.

El Rey de Iberoamérica

Desde el año 1996, el entonces Príncipe Felipe era el encargado de representar a España en las ceremonias de traspaso del mando presidencial en los países del continente americano. Pero donde más cómodo se sentía era en las cumbres de Iberoamérica. En Bogotá, Don Juan Carlos se reencuentra ahora con mandatarios que tampoco pudo ver en la cumbre del año pasado en Panamá, por estar convaleciente de su operación de cadera. Fue su primera ausencia desde que, en 1991, se celebró la primera de estas citas iberoamericanas en Guadalajara (México).

El Rey, pese al espíritu republicano de la región, el sentimiento anticolonial y los vaivenes de la Monarquía en los últimos años, es muy apreciado en diversos países de Latinoamérica por sus esfuerzos como jefe de Estado para hacer de España la puerta de acceso de la región a Europa.

Es, además, recordado por los colombianos por hacer callar durante la Cumbre de Chile al fallecido presidente venezolano Hugo Chávez, quien nunca despertó excesivas simpatías por su apoyo logístico y político a las FARC.

En otras palabras, Don Juan Carlos eligió Colombia a sabiendas de que jugaba en casa, convencido de su gran faena. Para irse por la puerta grande, a hombros, como hacían los grandes toreros ibéricos en los ruedos en los tiempos de gloria de La Santamaría de Bogotá.