Política

Mario Vargas Llosa

Mario Vargas Llosa agradece a Torra que haya mostrado la "verdad racista y discriminatoria"de los nacionalismos

El escritor ve a Pablo Casado como "uno de los pilares de la democratización de España"

Pablo Casado y Mario Vargas Llosa en la convención nacional del PP
Pablo Casado y Mario Vargas Llosa en la convención nacional del PPlarazon

El escritor ve a Pablo Casado como "uno de los pilares de la democratización de España"

Mario Vargas Llosa, Premio Nobel de Literatura en el año 2010, Premio Planeta en 1993 y Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1986, acudió ayer a la convención nacional del PP a expresar su visión sobre la actualidad española. Allí, el prolijo autor instó a afrontar en nacionalismo "a cara descubierta, sin complejos", y agradeció irónicamente al presidente de la Generalitat, Quim Torra, el haber mostrado "la verdad racista y discriminatoria"que tienen los nacionalismos.

Llosa no ocultó su reticencia hacia el mandatario del Govern: "Usted por lo menos dice la verdad, y su verdad es que los españoles somos perros rabiosos", afirmó durante su intervención. Sobre la comunidad latinoamericana, evaluó que, seguramente, ni si quiera serían perros, sino "microbios malsanos".

El escritor, que vivió durante cinco años en la ciudad condal, lamentó que los soberanistas la convirtieran "en una ciudad provinciana que se mira el ombligo ya que el nacionalismo le impide ver más allá de sus narices". "A esa Barcelona tenemos la obligación de salvarla, rescatarla y devolverle su hegemonía cultural", agregó.

Vargas Llosa aseguró que “todo nacionalismo es profundamente racista y discriminatorio y parte de un falso supuesto el de la superioridad” en función de un territorio y nación. “Hay nacionalistas que se fingen democráticos y pacíficos y que de una manera untuosa nos hablan de fraternidad y amor”. Pero el Premio Nobel de Literatura, que ha participado en varios actos de Ciudadanos y que no oculta su simpatía a esta formación, fue invitado para hablar sobre las sociedades abiertas y sus enemigos aseguró que “no hay nacionalismo que no esté cargado de prejuicios”. El escritor consideró que "el gran peligro para esa España modera y próspera"es el nacionalismo, que instó a combatir sin complejos, dando "la batalla de las ideas y la batalla electoral"y a llamarlo como lo que es, "un enemigo de la democracia y de la libertad".