El día después

Martín Ovejero, experto en comunicación no verbal: "Sánchez se mostró avergonzado e inseguro al tratar la amnistía"

Feijóo superó en su intervención a un "cabizbajo" candidato socialista por la "incisión y contundencia" de sus palabras, según el análisis del experto

El presidente del Gobierno en funciones y candidato a la reelección, Pedro Sánchez, durante la primera sesión del debate de investidura de Pedro Sánchez como presidente de Gobierno, en el Congreso de los Diputados, a 15 de noviembre de 2023, en Madrid (España). El Salón de Plenos del Congreso acoge hoy y mañana, 16 de noviembre, el debate de investidura del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez. El secretario general del PSOE tiene el apoyo de 179 diputados de los 350 del Congre...
Pedro Sánchez, abandona, mirando al suelo, la tribuna de oradores del CongresoDiego RadamésEuropa Press

José Luis Martín Ovejero, experto en comunicación no verbal de prolífica trayectoria, explica a LA RAZÓN que en la primera sesión de investidura del miércoles un Pedro Sánchez de "dos caras" que sufrió un radical cambio en su expresión corporal cuando en su intervención llegó el momento de tratar la amnistía a los dirigentes del 'procés'.

En la parte inicial de su discurso vimos, argumenta Ovejero, un Sánchez "tranquilo, seguro y confiado" que se mantuvo erguido en la tribuna de oradores, con la mirada alta, gestos de amplitud y el rostro relajado. "Cuando no lo está suele tensar la mandíbula", explica.

Pero su forma de desenvolverse cambió justo cuando mencionó la palabra 'amnistía': "Es muy llamativo que a partir de ahí baja la mirada y aprieta los labios". Unos gestos involuntarios que, por un lado, pueden denotar culpabilidad, inseguridad o hasta vergüenza, y, por el otro, son comunes cuando alguien trata de contener sus emociones.

Una absoluta "incoherencia comunicativa" que se produce cuando la comunicación corporal no se corresponde con lo que se está defendiendo. "Sánchez estaba defendiendo los beneficios y el valor positivo de la amnistía, pero se mostró inseguro y puede que hasta con cierto sentimiento de remordimiento", advierte este experto consultado.

Ovejero señala que el rostro y la manera de estar del líder del candidato socialista a la Presidencia es "una fotocopia" de cómo se vio a Carles Puigdemont el día de 2017 que, siendo presidente de la Generalitat, se aprobó en el Parlament la celebración del referéndum ilegal.

Comparación de la expresión corporal de Sánchez el lunes y de Puigdemont el día que se aprobó el referéndum ilegal en el Parlament
Comparación de la expresión corporal de Sánchez el lunes y de Puigdemont el día que se aprobó el referéndum ilegal en el ParlamentMartín OvejeroMartín Ovejero

Feijóo le "eclipsó" con "un discurso bien elaborado que le hizo daño"

Feijóo, destaca en su análisis Martín Ovejero, "eclipsó" contundentemente al líder del PSOE con su intervención en el Congreso en el que puede ser ya considerado uno de sus mejores momentos parlamentarios. "Estuvo muy potente porque el discurso estaba bien elaborado y generó impacto. Se nota que participó en su escritura porque estuvo implicado", sentencia.

Estuvo Feijóo especialmente hábil cuando dijo "no a la amnistía, no a ignorar a las víctimas del separatismo, no a borrar delitos de corrupción... no a Pedro Sánchez", frases breves con impacto que se sirvieron para exponer las medidas más polémicas del socialista y que fueron "latigazos" que hicieron "daño" a su adversario.

La bancada popular, además, contribuyó de forma improvisada a que Feijóo se "viniese arriba"coreando al unísono un "no" a cada frase con la que su candidato rechazaba distintos asuntos que centrales en las políticas de los socialistas. La del PSOE, sin embargo, trasladó con sus olas de aplausos "apoyo moral"a un candidato "sobrepasado".

Sobresale también por ingenioso, recuerda Ovejero, la alusión del presidente de los populares a la no continuidad de la morada Irene Montero en el Ministerio de Igualdad . "Con lo bien que lo han hecho ustedes en Igualdad y la señora Montero es una pésima ministra. Es una cosa sorprendente. Tiene usted el gobierno más feminista de la historia, ¿y va a cesar a la Ministra de Igualdad", afirmó el popular, despertando sonrisas y asentimientos tanto de la todavía responsable de Igualdad y de Ione Belarra. "Coherencia y responsabilidad", fue el broche que le puso a su comentado momento.

"Le sirvió para dos cosas: fastidiar a Sánchez y sumar otra incoherencia más a sus acciones. Un clásico 'divide y vencerás' con el que atacó personalmente a Sánchez por sus incoherencias y colectivamente a la futura coalición al meter el dedo en la herida que representan los dirigentes de Podemos en Sumar", aclara.