Tras el 23J

Moncloa rechaza las demandas de Junts para investir a Sánchez

"Cualquier cuestión que abordemos tiene que estar recogida en la Constitución", señalan.

La seguridad con la que en el Gobierno confía en reeditar la coalición tras las elecciones del 23 de julio, sorteando la repetición electoral, choca con la endiablada aritmética y con las pretensiones del partido político que tiene que dar su aval para una futura investidura de Pedro Sánchez. Mientras el líder socialista asegura que encontrará la "fórmula de la gobernabilidad", desde la formación de Carles Puigdemont ponen como precio para ello la amnistíay el referéndum de autodeterminación. Unas exigencias que rechazan tajantemente desde La Moncloa. "Cualquier cuestión que abordemos tiene que estar recogida en la Constitución", señalan, en referencia a que ambas peticiones no tienen cabida en la legalidad vigente.

En el Ejecutivo evitan la confrontación directa con Junts, conscientes de que tienen que cultivar la relación con este partido de cara al futuro, pero no ocultan que "si algo ha quedado demostrado en estos años de Gobierno del presidente Pedro Sánchez es que en Cataluña, como en el resto de España, solo cabe el marco constitucional". En estos términos se ha manifestado hoy la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, en la comparecencia posterior al último Consejo de Ministros antes del descanso estival. El Gabinete ha celebrado hoy su primera reunión en funciones, tras publicar el BOE el cese de Sánchez y todo su equipo, por lo que solo podrá aprobar en el futuro cuestiones ordinarias.

Desde Moncloa recuerdan a la formación de Puigdemont que el resultado de las elecciones generales, con el PSC como primera fuerza en Cataluña con 19 diputados, ha lanzado un mensaje claro y es de respaldo a la política desplegada por el Gobierno, en contraposición con la de los soberanistas. "A tenor de la expresión de la ciudadanía catalana, parece que eso ha gustado en Cataluña", ha señalado a continuación.

En todo caso, en el Ejecutivo no van a pisar el acelerador y trasladan ahora el foco al Congreso de los Diputados, delegando en los grupos parlamentarios cualquier contacto y negociación. La portavoz ha insistido en que se deben seguir los pasos e hitos que marca la democracia, después de la votación del 23J, la finalización del voto exterior, la recogida de credenciales por parte de los diputados en la Cámara baja y después la Constitución de las Cortes y la elección de la Mesa el día 17 de agosto. Por tanto ha pedido ir dándole "tiempo" a cada uno de estos procesos.

En esa misma línea ha subrayado la importancia de lo expresado por los españoles en las urnas. Según ha indicado, el presidente Sánchez convocó el adelanto electoral para que los ciudadanos clarificasen el rumbo que debe seguir España en los próximos años y estos han optado por los avances y rechazado "el retroceso", en alusión, a que los números del PP para gobernar con Vox no son suficientes. Además, en Moncloa esperan que el recuento del voto CERA, el de los españoles residentes en el exterior, no altere la opinión que "claramente" han expresado los españoles en las urnas y que, en caso de que se lleguen a mover uno o dos escaños, esto no cambiaría ese escenario, por lo que no podrán zafarse del yugo de Junts.