Noventa y un nombres para seis condiciones

Noventa y un nombres para seis condiciones. Será el 17 de agosto cuando Mariano Rajoy reúna en torno a las kilométricas mesas de la segunda planta del cuartel general del los populares a su Comité Ejecutivo Nacional. La guarda pretoriana del líder popular, junto a portavoces, vocales y barones, entre otros, tendrá que cerrar filas y valorar las seis condiciones que el líder de C’s, Albert Rivera, ha puesto encima de la mesa a cambio de un apoyo de investidura. El líder del PP deberá convencerlos para que voten «sí» y den luz verde a una negociación con C’s, un paso más para el desbloqueo. «Voy a intentarlo», dijo Rajoy después de reunirse con el Comité de Dirección, ayer. La decisión deberá ser unánime, aunque puede que genere debate interno. En el PP insisten en que para ellos, España está por encima del partido.

En el Comité Ejecutivo, Mariano Rajoy como líder es el máximo responsable del partido en cada uno de sus ámbitos territoriales en relación con los cuales ejerce sus facultades. En caso de urgente necesidad puede asumir las competencias de los órganos colegiados que estime necesarias para la solución de la emergencia de que se trate, con carácter temporal, hasta la reunión del Comité Ejecutivo o la Junta Directiva correspondiente, a los que acude para dar cuenta a efectos de control y eventual ratificación de las medidas adoptadas. Según fuentes populares, en 2015 este órgano se reunió cuatro veces y en lo que va de año ya lleva otras cuatro reuniones.

Entre sus competencias, el Comité Ejecutivo, dentro del ámbito territorial, se encarga de ordenar, coordinar y controlar las actividades del partido y adoptar las medidas que sean necesarias para el cumplimiento de los acuerdos que le han encomendado en los congresos y juntas directivas territoriales. Además, elabora informes y propuestas, define la estrategia general del partido, sus pronunciamientos políticos, programáticos y establecer las líneas de la acción política de los diversos grupos isntitucionales. Nombra a sus cargos, resuelve los conflictos, y elabora y aprueba el presupuesto del partido.