Gasto Público
Los representantes políticos de la Flotilla Libertad han percibido más de 16.000 euros en su mes de ausencia
Los cinco miembros de la embarcación que arribó a Israel no han renunciado a su sueldo pese a no haber cumplido con sus obligaciones
"Seguiremos ofreciendo protección diplomática". Con estas palabras anunciaba la semana pasada el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, la llegada del último avión con activistas españoles de la Flotilla de la Libertad al aeropuerto de Barajas. Con el regreso de Reyes Rigo, la activista mallorquina que mordió a una funcionaria israelita en un registro médico para regresar a España, junto con los miembros españoles de la segunda Flotilla interceptada por la Armada de Israel, el operativo que ha superado los 20.000 euros finalizó.
Desde que la embarcación comenzó su travesía en el puerto de Barcelona el pasado mes de agosto, hasta que fueron expulsados por el Gobierno de Benjamin Netanyahu a principios del mes de octubre, los miembros de la embarcación no han acudido a su puesto de trabajo. Aunque diversas personas hayan pedido una excedencia o simplemente se encuentren desempleadas, varios han sido los cargos públicos que no han renunciado a su salario. Entre las dos Flotillas que han acudido a Israel, se contabilizan cinco representantes políticos afincados en partidos de la izquierda mediática como Sumar, la CUP o Podemos.
Pilar Castillejo, Jordi Coronas, Lucia Muñoz, Jimena González y Juan Bardera han cambiado las trifulcas del Parlament de Cataluña, de su homónimo valenciano o de la Asamblea de la Comunidad de Madrid por las aguas del mar, el algarabío de la fiesta y la defensa de Palestina con una misión, que según los activistas era con un objetivo de ayuda humanitaria. A diferencia de otros compañeros de la Flotilla de la Libertad ninguno de los representantes públicos ha renunciado a su sueldo. Es más el día que se produjo la detención de la diputada de la CUP, Pilar Castillejo, la Generalitat de Cataluña suspendió la actividad plenaria programada.
Según los datos consultados por LA RAZÓN en los portales de transparencia de las diferentes comunidades autónomas, se han destinado 16.308 euros en los sueldos de los cinco cargos que se han ausentado de sus obligaciones. Desgranado de manera individual, la diputada de la CUP y exteniente de alcalde en Ripollet, Pilar Castillejo, lidera la clasificación con 4.128 euros mensuales destinados a su sueldo. Muy de carca se encuentra la diputada de la Asamblea de Madrid, Jimena González- la diputada transexual de Podemos- con una partida mensual situada en los 3.739,76.
Sin abandonar las instituciones con dobles lenguas, el concejal de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona y experto en artes gráficas, Jordi Coronas Martorell, no ha renunciado a un importe de 2.897 euros, mientras que la concejala y exdiputada de Podemos en Baleares, Lucia Miriam Muñoz Dalda, ha percibido 2.844 euros. En cuanto a Juan Bardera, el último político español en activo que se embarcó en la Flotilla de la Libertad, los organismos públicos han reservado una partida de 2.700 euros.
España se ha gastado en la Flotilla de la Libertad cerca de 40.000 euros
Junto con los vuelos, las dietas y los sueldos de los representantes públicos, a España la Flotilla de la Libertad le ha costado un total aproximado de 37.280, ya que según recogió este periódico cada billete de avión se situaba entre los 350 y los 400 euros.
A diferencia de la posición de España, Portugal ha reclamado los gastos del traslado. Los cuatro ciudadanos que fueron rescatados entre los que se encontraba la líder del 'Bloque de Izquierda', Mariana Mortágua o la actriz Sofía Aparício recibieron una carta con la que el Gobierno reclamaba los gastos del traslado de los activistas desde Israel hasta el aeropuerto de Lisboa.