Ministerio de Justicia

Rigau, sobre el 9-N: «Si me tienen que detener quiero que lo hagan los Mossos»

Para la ex consellera de Educación, «una sociedad basada en la desobediencia, a la larga, no ayuda a la cohesión»

La exconsellera de Educación Irene Rigau
La exconsellera de Educación Irene Rigaularazon

Para la ex consellera de Educación, Irene Rigau, «una sociedad basada en la desobediencia, a la larga, no ayuda a la cohesión»

La exconsellera de Educación Irene Rigau y el concejal de Capgirem Vic Joan Coma han mostrado hoy su desacuerdo sobre posibles desobediencias a decisiones judiciales en el debate "¿Cuál es el precio de la desobediencia?", que ha planteado esta mañana Catalunya Ràdio.

Rigau, que está imputada por el 9-N, ha afirmado en el debate que le ha dicho al conseller de Interior, Jordi Jané, que "si me deben detener, quiero que lo hagan los Mossos".

Para Rigau, "una sociedad basada en la desobediencia, a la larga, no ayuda a la cohesión", y ha añadido que "muchos actos de desobediencia generan un miedo callado. Y todo lo que no sea sumar no es positivo".

Para Irene Rigau, "la desobediencia tiene una connotación que no me resulta cómoda", además de que "pedir a ciertas personas que desobedezcan con las consecuencias que comporta, a veces, no suma".

No obstante, la exconsellera ha indicado que es partidaria de "ir a declarar para explicar el porqué y sumar gente con las explicaciones".

Eso sí, ha dejado claro que "yo no considero que haya desobedecido. Teníamos un compromiso. Discrepar no quiere decir confrontar".

Por su parte, el edil de Vic Joan Coma i Roura, imputado por desobediencia ya que se negó a ir a declarar a la Audiencia Nacional, ha señalado que ven "grave que el PSC haya votado a favor de llevar a juicio a Francesc Homs".

En su opinión, "si queremos autodeterminarnos, hemos de asumir unos costes"y, además, "la desobediencia es una manera de desnudar el carácter antidemocrático del Estado español.

El edil ha insistido en que "para ejercer el derecho a decidir, debemos tener el derecho a desobedecer leyes injustas".

"El problema no lo tenemos nosotros, sino quien judicializa la política", ha mechado Coma.