¡Arriba ese culete!

Santum, el centro de belleza favorito de muchas de nuestras celebrities, ha creado el protocolo Bottom Up para cuidar y realzar una de las partes más esenciales del cuerpo de toda mujer.

“Los glúteos son una de las zonas del cuerpo en la que la mujer suele centrar su atención, es cierto que durante la operación bikini adquieren más importancia, pero durante todo el año quieren lucir unos glúteos perfecto y los jeans lo demuestran. Tras una larga experiencia y visión profesional he observado como tener unos glúteos tonificados les hace sentir más seguras de si mismas, les empodera” explica Daniel Marín, cosmetólogo y director del Espacio Santum.

El tratamiento Bottom up by Santum, no consiste únicamente en la magia de una sola aparatología. El primer paso del que disfrutaremos será una exfoliación con cepillos iónicos para que se produzca la renovación de la piel y la estimulación del riego sanguíneo. Proporcionando así, nutrición a la piel y consiguiendo un aspecto sedoso.

El objetivo de Bottom Up es directo, estamos ante un tratamiento reafirmante de glúteos que consigue mantenerlos firmes y tonificados por más tiempo plantándole cara a la flacidez de una manera efectiva. Basado en las corrientes rusas, durante 20 minutos, trabaja la estimulación por medios externos al músculo, es decir, actúa mediante electro estimulación en las terminales nerviosas y neuromusculares haciendo que la masa muscular se contraiga rítmicamente, de esta manera, le proporcionamos firmeza y desarrollo al músculo.

Uno de los beneficios que nos provee es la eliminación paulatina de la flacidez, ya que este impulso eléctrico penetra profundamente en la zona a tratar. Las ondas rusas más allá de dar firmeza, modela, ya que su efecto más importante es aumentar la masa muscular.

Tras las corrientes rusas, por medio de masajes enérgicos, se aplican principios activos reafirmantes (silicio orgánico y la centella asiática) potenciamos con una mascarilla especifica para glúteos de frutos rojos, el buen aroma está asegurado. El protocolo pone el punto y final con un masaje mediante copas de titanio para potenciar el efecto tensor y la aplicación de una crema reafirmante.