Educacion

¿Por qué los niños que mejor leen tienen padres que fomentaron estos hábitos desde bebés?

Según Maya Payne Smart, experta en alfabetización infantil formada en la Universidad de Harvard, las acciones cotidianas de los padres son clave para preparar a sus hijos para el éxito lector.

(Foto de ARCHIVO) Recurso niños leyendo REMITIDA / HANDOUT por AYUNTAMIENTO DE LAS ROZAS Fotografía remitida a medios de comunicación exclusivamente para ilustrar la noticia a la que hace referencia la imagen, y citando la procedencia de la imagen en la firma 28/11/2017
Niños leyendoAYUNTAMIENTO DE LAS ROZASEuropa Press

Fomentar el amor por la lectura en los niños comienza mucho antes de que puedan sostener un libro. De hecho, muchos de los hábitos que desarrollan sus habilidades lectoras ni siquiera implican tener un libro en las manos. Según Maya Payne Smart, experta en alfabetización infantil formada en la Universidad de Harvard, las acciones cotidianas de los padres son clave para preparar a sus hijos para el éxito lector.

Si queremos que un niño adopte un hábito, lo más efectivo es que vea ese comportamiento reflejado en sus padres. Así como promovemos la actividad física o la gestión emocional con nuestro ejemplo, leer regularmente frente a los niños también marca la diferencia.

Un momento perfecto para introducir la lectura es la hora de dormir, leyendo cuentos a los pequeños. Sin embargo, según Smart, esto no es suficiente: la exposición a las palabras debe ser constante y natural durante todo el día.

Cinco hábitos que desarrollan grandes lectores

Maya Payne Smart destaca cinco prácticas esenciales que los padres pueden adoptar para estimular la alfabetización temprana en sus hijos:

1. Conversaciones a Través del Balbuceo

Responder al balbuceo de los bebés con palabras reales, contacto visual y sonrisas fomenta el desarrollo del lenguaje. Esta interacción, conocida como "servir y devolver", no solo fortalece el vínculo afectivo, sino que también construye las bases neurológicas para la comprensión lectora y social futura.

2. Relacionar Letras y Sonidos en la Vida Cotidiana

Muchos padres enseñan las letras, pero pocos enfatizan su sonido. Integrar el aprendizaje fonético en conversaciones cotidianas ayuda a los niños a entender que las letras representan sonidos y palabras escritas, lo cual es esencial para una lectura fluida.

3. Hacer Preguntas y Escuchar las Respuestas

Formular preguntas abiertas y dar a los niños tiempo para responder estimula su pensamiento, enriquece su vocabulario y mejora sus habilidades de comprensión. La clave no es solo preguntar, sino escuchar activamente las respuestas.

4. Leer en Cualquier Momento del Día

Aunque la lectura antes de dormir es importante, aprovechar otros momentos del día —como la mañana, cuando los niños están más atentos— maximiza el aprendizaje. Cuantas más experiencias de lectura tengan los pequeños, mayor será su desarrollo lingüístico y cognitivo.

5. Jugar con las Palabras

Canciones, rimas, trabalenguas y adivinanzas son herramientas valiosas para que los niños jueguen con los sonidos del lenguaje. Estas actividades fortalecen su conciencia fonológica, paso crucial para dominar la lectura.

Leer desde pequeños: Clave para el éxito a largo plazo

Estudios de universidades como Cambridge y Fudan muestran que una buena base lectora en la infancia predice mayores logros académicos, mejor salud mental y habilidades sociales más sólidas en la adolescencia y adultez.

Los niños que desarrollan el amor por la lectura desde pequeños tienden a permanecer más tiempo en el sistema educativo, conseguir mejores empleos, manejar mejor sus emociones y mostrar mayor empatía.

Más allá de los logros académicos y profesionales, los niños que leen regularmente son, en general, más felices. Y no hay mayor deseo para un padre que ver a sus hijos disfrutar de la vida con plenitud.