LaLiga Santander
El Barça de Messi y Ter Stegen toma el Metropolitano (0-1) y sigue líder
Griezmann fue pitado cuando anunciaron su nombre en el Wanda. Y también cada vez que tocaba la pelota
El juego del Barcelona acaba en los pies de Messi, pero empieza en las manos de Ter Stegen. El portero es cada vez más importante en un equipo que ha perdido el brillo y el dominio de los partidos que exhibía hace años. La agilidad, la colocación y los reflejos de Ter Stegen se hacen cada vez más necesarios para el Barcelona. Y lo sostuvieron durante gran parte del encuentro. Especialmente en los primeros minutos.
El Atlético se olvidó de los miedos que atacan con cierta frecuencia a su entrenador y se fue a buscar al Barcelona desde el comienzo. Presión alta de los rojiblancos y agobios en los azulgrana, que no conseguían llegar al área contraria.
Hermoso se encontró con sus reflejos en un remate en el área pequeña. Ter Stegen apareció para sacar un balón que sólo podía ser gol. No tenía a nadie que le molestara el central rojiblanco, pero tuvo que rematar de primeras con la derecha. Todos eran condicionantes en contra, pero ninguno tanto como la presencia de Ter Stegen sobre la línea.
El guardameta del Barcelona volvió a hacerse enorme para sacar un remate de cabeza de Morata a la salida de un córner que no tenía otro camino que el el gol. Ter Stegen había detenido él solo la avalancha rojiblanca. No tenía demasiada ayuda, especialmente por la banda izquierda, por la que Griezmann no molestaba demasiado a la defensa del Atlético y Junior no ayudaba.
El lateral izquierdo estuvo a punto de marcarse en su propia portería al desviar un pase atrás de Trippier que terminó con el balón en el poste y poco después hizo una falta a Correa en el borde del área a la que no le faltó mucho para ser penalti.
Simeone había sacrificado desde el comienzo las llegadas de Lodi por la banda izquierda para situar a Saúl en el costado zurdo de la defensa. Era la manera que encontró el Cholo para situar a cuatro medios centros en la alineación sin sacrificar a Correa o a Joao Félix, que volvía a ser titular después de su lesión. Saúl siempre contaba con la ayuda de Koke en su costado para contener a los azulgrana, que encontraron su primera oportunidad en un remate de cabeza de Piqué al larguero.
El Barcelona iba ganando terreno y aprovechaba los espacios que dejaba la ambición del Atlético a su espalda. Por allí corría Messi, que avisó varias veces antes de que llegara la definitiva. Con metros por delante, De Jong se convertía en su mejor socio para el contraataque y fue de una pelota recuperada por el holandés de donde nació el gol que decidió el encuentro.
Messi agarró el balón en el centro del campo y lo llevó hasta el borde del área, donde Luis Suárez se la devolvió en una pared. El resto ya se ha visto muchas veces, aunque sigue siendo igual de imposible detenerlo para los porteros. El argentino disparó desde el borde del área buscando el rincón de la portería al que era imposible que llegara Oblak.
El Atlético, que había buscado con insistencia a Morata, lo intentó todo para buscar el empate. Hasta recurrió a la subida de Oblak al área contraria para rematar la última jugada. Sin éxito. El contraataque posterior, sin portero en el Atlético, lo frenó Mateu con el final del partido. Messi y Ter Stegen ya habían hecho su trabajo.
0 - Atlético de Madrid: Oblak; Trippier, Felipe, Hermoso, Saúl; Correa (Lemar, m. 73), Herrera (Lodi, m. 86), Thomas, Koke; Joao Félix (Vitolo, m. 66) y Morata.
1 - Barcelona: Ter Stegen; Sergi Roberto, Piqué (Umtiti, m. 82), Lenglet, Junior; De Jong, Rakitic, Arthur (Vidal, m. 73); Messi, Luis Suárez y Griezmann.
Gol: 0-1, m. 87: Messi.
Árbitro: Mateu Lahoz (C. Valenciano). Amonestó a los locales Thomas (m. 8), Correa (m. 22), Vitolo (m. 69) y Felipe (m. 73) y a los visitantes Júnior (m. 18), Piqué (m. 31), Rakitic (m. 52) y Lenglet (m. 65).
Incidencias: partido correspondiente a la decimoquinta jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio Wanda Metropolitano ante unos 64.226 espectadores.
✕
Accede a tu cuenta para comentar
Pasividad ante la tragedia