Tradiciones
Así es la fiesta gallega que celebra la vida desde el umbral de la muerte
Esta tradición de raíces medievales une fervor religioso y simbolismo
Pocas celebraciones en Galicia reflejan de manera tan directa y sincera la relación del pueblo con la muerte como lo hace la Festa das Mortallas de A Pobra do Caramiñal.
En esta localidad de la ría de Arousa, la muerte se convierte una vez al año en símbolo de gratitud y vida. Lo hace a través de una antigua procesión donde los protagonistas caminan tras los ataúdes que un día pudieron haber ocupado, portados por sus familiares, en señal de agradecimiento al Nazareno por haber superado una grave enfermedad o librado de la muerte.
Una procesión singular
La Procesión Votiva das Mortallas, que se celebra el tercer domingo de septiembre, es el momento más esperado de las fiestas. Los ofrecidos, conocidos también como nazarenos, participan vestidos con hábito mortuorio. Portan el color morado si son adultos casados o viudos, o blanco en el caso de los niños y niñas. La imagen del féretro vacío simboliza la muerte evitada.
Miles de personas, devotos y curiosos, acompañan cada año el cortejo que sale de la iglesia de Santiago do Deán, recorre el casco histórico y las calles principales de A Pobra y regresa al templo en medio de un fervor religioso que resulta estremecedor. Muchos asistentes también caminan descalzos, cubiertos con túnicas moradas y portando cirios con exvotos.
Origen y leyenda
Las raíces de esta tradición se remontan al siglo XV, aunque el culto al Nazareno en A Pobra ya estaba documentado en el XIV. Una leyenda narra que el regidor local Don Juan Linares, enfermo y cercano a la muerte, se encomendó al Nazareno y recobró la salud. Como muestra de gratitud, acudió a la procesión amortajado y ordenó que unos condenados a muerte portasen su féretro en el cortejo, a quienes finalmente indultó a su llegada al atrio de la iglesia.
Este gesto dio origen a una tradición que persiste más de cinco siglos después y que convirtió a la procesión en un referente cultural y religioso único en Galicia, hasta el punto de haber sido mencionada por Valle-Inclán en sus Comedias Bárbaras.
Fiesta y devoción
La Festa do Nazareno se extiende durante cuatro jornadas que combinan lo religioso con lo lúdico. Del 19 al 22 de septiembre, A Pobra acoje procesiones, verbenas, conciertos y pasacalles, además de espectáculos para todas las edades.
La programación arrancará mañana, viernes 19, con el pregón desde el balcón del ayuntamiento y actuaciones musicales como las de Monoulious DOP o Cantareiras Arrincadeira. La jornada concluirá con una sesión de música disco.
El sábado 20 predominarán los pasacalles a cargo de bandas de música y gaitas, así como una gran verbena nocturna, con actuaciones de grupos como América y G. Faz.
El domingo 21, día grande, tendrá lugar la Procesión Votiva das Mortallas a las 10:30 de la mañana, núcleo central de la fiesta en la que los féretros vacíos vuelven a recorrer la villa entre miles de devotos. La tarde estará protagonizada por conciertos y, por la noche, la actuación de la orquesta Panorama.
El lunes 22 pondrá el punto final con pasacalles, una fiesta infantil y holi, y un espectáculo de drones y fuegos artificiales acuáticos como cierre.