Turismo

Unos de los pueblos más bonitos de Galicia para National Geographic: una cueva cargada de misterio y una catedral inolvidable

Su casco antiguo o sus vecinos ilustres configuran la historia de un lugar donde la leyenda habla de un celoso hechicero que sepultó a la hija del Rey Cintolo

Vista panorámica de Mondoñedo.
Vista panorámica de Mondoñedo. Wikipedia

En la Mariña Lucense los bosques se confunden con el mar. Es un pedacito de Galicia donde el verde infinito alcanza al azul eterno del Cantábrico, que se expande a lo largo de un centenar de kilómetros de costa. Ahí se salpican, de un lado a otro, la playa de las Catedrales o la Ría de O Barqueir; el estuario del Sor o el del Eo, Foz, Viveiro y Ribadeo.

Pero no todo es mar en A Mariña. Hacia dentro, donde la vista deja atrás ese azul indescifrable del Cantábrico, se encuentra un tesoro inadvertido, casi inesperado, Mondoñedo, uno de esos pueblos que cautivan la atención del visitante y que hasta National Geographic sitúa entre los cien más bonitos de España que debes visitar este verano.

Situado en un amplio valle abierto hacia ese Cantábrico que no ve pero que intuye, Mondoñedo se presenta como una de las más evocadoras capitales del antiguo Reino de Galicia. Una parada ineludible para los peregrinos que, cada jornada, recorren su pedacito de Camino, en este caso de la primigenia ruta por el Norte.

Todo es belleza e historia en Mondoñedo: desde su casco antiguo, declarado Bien de Interés Cultural, hasta la plaza de la Catedral, donde confluyen la inmensa mayoría de calles de la villa y que preside un templo cuya construcción data ya del siglo XIII.

Catedral y barrio dos Muíños

Catedral de Mondoñedo
Catedral de MondoñedoLa Razón

En concreto, la Catedral Basílica de la Asunción, declarada Monumento Nacional en 1902, se empieza a levantar en 1219 y se consagra por el Obispo Martín en 1242. Más tarde, entre los siglos XVI y XVII se abrió la girola para obtener mayor amplitud y se prolongaron las naves laterales, y en el XVIII se realiza una importante modificación en la fachada con la construcción de dos torres de tres cuerpos rematadas con cúpulas y se añade un tramo más a cada lado del crucero. El resultado es una amalgama de estilos arquitectónicos que ofrecen al visitante un templo inolvidable.

Cerca, en el propio casco histórico, surge el barrio dos Muíños, donde el agua corre todavía por debajo de las antiguas casas de piedra, procedente del río Valiñadares. Canales que surgen como recuerdo de la importancia de este recurso natural, que antaño ponía en funcionamiento los molinos de la zona.

Era una época en la que Mondoñedo contaba con ilustres visitantes y vecinos, algunas de cuyas casas se conservan todavía. Porque el pueblo también se puede recorrer de la mano aquellos que consiguieron otorgar a Mondoñedo su propia dimensión histórica y cultural: el Mariscal Pardo de Cela, Álvaro Cunqueiro, Leiras Pulpeiro, Pascual Veiga o los poetas formados en el Seminario de Santa Catalina, que representan a toda una generación de literatos.

Una dimensión que perpetúa el Camino de Santiago, declarado Patrimonio de la Humanidad en 2015 junto con la Catedral- Basílica, confiriendo a la villa proyección que sustenta el reconocimiento mundial a sus valores histórico- artísticos. No en vano, en Mondoñedo se celebra también la fiesta más antigua de Galicia (1156), la Feria de As San Lucas, que tiene lugar en octubre y está declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional.

Y todo ello sin olvidar la gastronomía, porque, a fin de cuentas, estamos en Galicia. Aquí destaca la Tarta de Mondoñedo, un postre que corona cualquier menú que incluya la empanada, el cocido o las carnes de la zona.

Naturaleza y alrededores

Cueva del Rey Cinolo.
Cueva del Rey Cinolo. Turismo de Galicia

Pero Mondoñedo, como toda la Mariña lucense, es también naturaleza. Muy cerca se alza el Convento de Os Picos, con su singular vía crucis, y un extraordinario patrimonio arqueológico en el que sobresale el castro de Zoñán. Y también próxima, en la parroquia de Argomoso, se localiza uno de los prodigios geológicos de Galicia: la cueva del Rey Cintolo, la más grande de Galicia.

El agua es la protagonista de formación de este enclave, configurando una estructura laberíntica de 7.000 metros de galerías. El desnivel máximo ronda los 75 metros, con aguas interiores que forman varias lagunas y una corriente subterránea, el río Celtas, en la cota inferior.

Un paraje envuelto en el silencio y las leyendas, como aquella de la que proviene su nombre. El Rey Cintolo, dueño y señor del valle de Brea, tenía una bella hija llamada Xila. Esta se enamoró de un conde provocando los celos de un hechicero, que no dudó en sepultar el reino bajo tierra. Desde entonces, la hermosa Xila Pero un hechicero, celoso, sepultó el reino de Cintolo en el interior de la tierra. Según la leyenda, la hermosa princesa aguarda que un caballero valiente consiga rescatarla y deshacer el hechizo.