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Alimentación

Los expertos lo tienen claro: la corteza del queso se puede comer, pero solo en estos casos

Uno de los productos más consumidos en España presenta esta parte que es consumida por algunos y odiada por otros

El queso es uno de los productos más consumidos en España y todo el mundo y su corteza genera debate en la sociedad acerca de si su consumición es aconsejable
El queso es uno de los productos más consumidos en España y todo el mundo y su corteza genera debate en la sociedad acerca de si su consumición es aconsejableDreamstime

El queso es uno de los productos más consumidos en España. Solo, como aperitivo o acompañado por otros alimentos, lo cierto es que cualquier persona se deleita con esta comida. No solo en nuestro país, sino tiene una historia tan milenaria que es popular en todo el mundo. Así, han surgido variedades, diferentes sabores y salsas, pero en muchas ocasiones, podemos encontrarlo con su corteza, una parte que muchos consumen y otros odian. ¿Qué dicen los expertos sobre esta pieza del queso?

Las evidencias señalan que su origen data de hace más de 4.000 años. Se cree que su invención fue accidental, cuando la leche almacenada en recipientes hechos de estómagos de animales se cuajó naturalmente debido a la presencia de enzimas.

Existen cientos de variedades de queso, que se pueden clasificar también por diversos factores. Por ejemplo, el tipo de leche, pues la leche puede proceder de vaca, cabra, oveja o búfala. Por otro lado, según su proceso de producción puede ser fresco, blanco, duro o semiduro, así como procesados o azules.

¿Se puede comer la corteza del queso? Esto es lo que dicen los expertos

El queso es un alimento rico en nutrientes que proporciona proteínas, calcio, grasas, vitaminas y minerales como el fósforo o el zinc. Esto ha hecho que tenga un papel importante en la cultura y gastronomía de muchos países, siendo uno de los alimentos lácteos por excelencia. Pero cada vez que es consumido, surge la duda sobre su corteza, por si debe ser o no consumida.

Y es que algunas personas optan por consumirla, pero otras no. Y según los expertos, no es aconsejable debido a su composición, que puede estar elaborada con productos naturales o artificiales. Mientras las cortezas podríamos comerlas si son naturales, debemos evitar las artificiales.

Esta parte del queso sirve para proteger el producto, y existen varios tipos como de aceite de oliva, cera, sidra, corteza o plantas aromáticas y especias. Como vemos, muchas cortezas de queso son seguras para comer y pueden añadir una dimensión adicional al sabor del queso, pero conocer la procedencia es esencial.

Las cortezas naturales se forman durante el proceso de maduración del queso y están hechas principalmente de la propia cuajada y mohos naturales. Generalmente seguras para comer, aunque pueden ser duras o tener una textura desagradable. Se recomienda probar un poco para decidir si te gusta.

Si bien no representan un riesgo para la salud, la recomendación general es prescindir de la corteza, sobre todo por no conocer su procedencia. Por ello, debemos seguir algunas consideraciones como la higiene (asegurándonos de que la corteza no tenga signos de deterioro) o la información del propio producto.