tuitfamoseando: «Queridos, no confundáis la oficial con la falsa»

Muy en plan primera dama de Francia, el último tuit hasta ahora de la cuenta de Valerie Trierweiler (@valtrier) relataba su encuentro con la presidenta de una asociación contra el maltrato infantil. Desde ese 9 de enero no ha vuelto a escribir quien generalmente solo tuitea una vez cada siete días. El pasado jueves, cuando le tocaba hacerlo de nuevo, seguía hospitalizada tras el «affaire» Hollande-Gayet. «Nunca haremos lo suficiente por la dignidad de las mujeres», proclamaba su marido presidente en un tuit retuiteado por Trierweiler el pasado 8 de marzo y que hoy adquiere un sentido insospechado. Tuitera poco activa desde septiembre de 2011, la todavía primera dama francesa borró concienzudamente todos los tuits que escribió antes de julio de 2012, dos meses después de su llegada al Elíseo. Un borrado que incluye su polémico tuit de apoyo al entonces contrincante de Segolene Royal, la misma con quien formó un triángulo que ahora parece repetirse, aunque con otros vértices. Una lástima, porque su perfil es tan institucional como las cortinas presidenciales. Niños abandonados, mujeres maltratadas y conflictos centroafricanos pueblan una cronología sin concesiones. Con una excepción: cuando alertó contra la cuenta «fake» que la imita. «Queridos, atentos a no confundir la original y la falsa». Sin segundas.

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La primera dama se disculpa

Aunque su escasa actividad tuitera apenas deja margen para perpetrar meteduras de pata sonadas, hasta la primera dama francesa a veces se equivoca escribiendo, comete faltas de ortografía... y se disculpa por ello tras la oportuna corrección, lo que no todos hacen. "Perdón, error de manipulación". Para los desmentidos, réplicas y agenda oficial tiene una segunda cuenta (@infosvaltrier), gestionada por su oficina presidencial.