Prevenir los problemas sexuales por José Luis ARRONDO

Leí una vez el comentario de un cirujano al que sus pacientes le agradecían cuando le salvaba la vida en una operación a corazón abierto pero nadie le daba las gracias si conseguía que dejasen de fumar, y probablemente también les estaba salvando la vida.Con los problemas sexuales sucede lo mismo. Los hombres, en general, se preocupan menos de si toca ir al médico general, al dentista, al psicólogo y no digamos al urólogo o al sexólogo o al andrólogo, para realizar sus revisiones periódicas. Las mujeres tienen asumido que es conveniente acudir anualmente al ginecólogo. En el caso del hombre, sería también necesario iniciar los controles de salud con mayor precocidad cada dos años cuando se es más joven, pero de forma anual a partir de los 45.El hombre puede acudir al médico para solucionar su disfunción eréctil, pero es necesario que acuda igualmente a la consulta ya que puede ser un síntoma-alerta de otras enfermedades como la diabetes, la hipertensión arterial, los trastornos cardiovasculares o la depresión. El médico puede detectar estos problemas e iniciar un tratamiento con el fin de evitar que empeore la calidad de la erección, restablecer la actividad sexual, y mejorar la salud global.Los trastornos del deseo sexual pasan más desapercibidos al producirse de forma gradual y se suelen atribuir a la monotonía del día a día, a la edad….Pero también puede tratarse de un descenso de la testosterona. Esta hormona, aparte de ser fundamental para el deseo sexual y la erección, también lo es para muchas otras funciones del organismo (insomnio, depresión, perdida de fuerza...). Las preguntas del médico y un análisis de sangre son suficientes para detectar si el problema existe y, en caso necesario, iniciar el tratamiento sustitutivo con testosterona que es de fácil aplicación y gran efectividad.