ANÁLISIS: Más conflictos Valentín Martínez-Otero

– ¿Ha aumentado el número de personas con problemas psicológicos derivados de la crisis?
– Sí. Hay que pensar, por ejemplo, en el negativo impacto del desempleo, tanto entre los que buscan su primer empleo como entre los que lo han perdido. Con la vivencia del desempleo aumentan las conductas suicidas, adicciones al alcohol u otras drogas, trastornos de ansiedad, etc. Por tanto, los conflictos personales, dependientes de variables individuales y circunstanciales, se acentúan y se extienden, en mayor o menor cuantía, a las distintas áreas del desempleado: vertiente familiar, social, tiempo libre… La mejor forma de afrontar la crisis, y en su caso el desempleo, es mediante una reorganización en la que también participe el entramado sociofamiliar. Se trata de sustituir la pasividad y la negatividad por una actitud mental positiva acompañada de los medios necesarios para encontrar trabajo, por ejemplo, a través de un proceso formativo y un plan realista de búsqueda de empleo.

– ¿Las familias están asimilando la nueva situación?
–No les queda más remedio, aunque con alto coste psíquico y social. Hay que pensar en las muchas frustraciones que generan estas situaciones, en los sentimientos de desilusión, de desesperanza, de cambio forzado del estilo de vida, de temores, de estrecheces económicas, de sufrimiento, de sentimiento de culpa, de vergüenza…
 

Valentín Martínez-Otero
Doctor en Psicología