Barajas

Consumo interno y externo por J M Zuloaga

La Razón
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Hemos vuelto a los errores del pasado. Durante la negociación de 2006-2007, los comunicados de ETA se dividían, según los defensores del «proceso», entre los que eran de «consumo interno» (para los pistoleros, pero cuya lectura nos llevó a la realidad tristemente confirmada por el atentado de la T-4 de Barajas) y los que eran de obligada lectura, que gustaban a los políticos metidos en el embrollo, los mismos que ahora. El de ayer, por supuesto, es, para esos políticos, una especie de nota interna de la banda. No es así. Está dirigido a los gobiernos de Francia y España. Decir contrario es una «absurdez» y perdón por la «bilbainada». Recuerdo una conversación con uno de los políticos que en 2006 llevaban, desde el Gobierno, las conversaciones con ETA. Hablábamos del comunicado hecho público en agosto, y me dijo eso, que era de «consumo interno». Meses después, su rostro paseando entre los escombros de la T-4 era la imagen de la rabia y la impotencia. El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, repitió ayer el argumento. La banda está encantada cuando se tergiversan sus palabras, porque puede seguir con la estrategia. Parafraseando a los galos de Obelix, debe decir: «estos españoles están locos». El comunicado publicado en "Gara"conlleva una amenaza patente. ETA puede hacer público en cualquier momento (¿por qué no en la última semana de la campaña electoral del 20-N?) su «labor callada que no tiene reflejo público». ¿Se trata de negociaciones con sus correspondientes actas? ¿Quién puede ser la víctima política?. Alfredo Pérez Rubalcaba, antes de pasarse, aparentemente, al «lado oscuro de la fuerza», por utilizar una cita cinematográfica, y, junto con Patxi López, diseñar una estrategia que los malos aplauden desvergonzadamente, era el mayor enemigo de ETA. Nadie sobre la tierra es tan odiado por la banda como el ex ministro del Interior. Como no deseo mal a nadie (excepto a los terroristas, en sala de Justicia y acompañados de sus letrados), confío en que los pistoleros no aprovechen la ocasión para arruinarle el difícil trabajo que realiza para sacar al PSOE del pozo en el que le ha sumido José Luis Rodríguez Zapatero.