El superávit de la Seguridad Social cae un 435% hasta agosto

Madrid- La crisis se extiende por todas las cuentas del Estado, y las de la Seguridad Social no podían ser una excepción. Cayeron hasta agosto un 43,5%, aunque mantuvieron un superávit de 2.721 millones de euros (el 0,3% del PIB), resultado de unos ingresos de 81.676,52 millones (un 0,19% más que en igual periodo de 2011) y unos gastos de 78.955,44 millones (un 2,93% más). Sin embargo, en términos homogéneos, es decir, sin contar las transferencias del Estado a la Seguridad Social, los números positivos habrían caído un 73,42% hasta los 1.280,59 millones.

En el capítulo de ingresos, el 83% del total corresponde a cotizaciones sociales, que han descendido 2,58 puntos porcentuales y suman 68.149,59 millones de euros. Aquí destaca que las cotizaciones de trabajadores ocupados cayó un 3,52%, mientras que la de desempleados subió un 6,11%. Hasta este momento, los ingresos por cotizaciones suman un 64,1% de lo previsto para todo el 2012, estimado en 106.322,96 millones.

Del capítulo de gastos, la partida más importante, 73.367 millones, un 93% del total, ha ido destinada a familias e instituciones. En este capítulo, 70.911 millones correspondieron a pensiones y prestaciones contributivas. Llama la atención la caída de las correspondientes a maternidad, paternidad y riesgo en el embarazo, que fue de un 2,73%, hasta los 1.494,91 millones, y la correspondiente a incapacidad temporal, que lo hizo en un 10, 37%, hasta los 2.853,89 millones.

También ayer el Ministerio de Empleo hizo públicos los datos relativos a la nómina de pensiones contributivas, que alcanzó, a 1 de septiembre, los 7.444,11 millones, un 4,4% más que en el mismo periodo de 2011. De esta cantidad, más de 5.079 millones correspondieron al pago de la nómina de las pensiones de jubilación (un 5% en relación con septiembre de 2011); 1.401 millones, a pensiones de viudedad (el 3,1% más); 838,6 millones, a incapacidad permanente (un 2,4% más); 106,1 millones a orfandad (un incremento del 7,6%); y 18,7 millones a favor de familiares (3,9% más). La pensión media se situó en 832,46 euros, y la de jubilación en 950,16.
Sobre las pensiones, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, quiso enviar un mensaje de tranquilidad, asegurando, en declaraciones a la SER, que esta partida «es lo último que se puede tocar», y confirmó que «se ajustarán a la subida de la vida», en referencia a la actualización que prometió la semana pasada Mariano Rajoy. La vicepresidenta recordó que las pensiones se han revalorizado todos los años excepto en 2010, con Rodríguez Zapatero.