Habitaciones sin baño

MADRID- El hostal Welcome, donde se alojan los once ex presos políticos cubanos y sus familiares desde su llegada a España, no reúne las mínimas condiciones de comodidad que cabría esperar. Los aseos comunes de esta pensión no han convencido a algunos de los recién liberados, sobre todo teniendo en cuenta que la gran mayoría de ellos padece problemas gastrointestinales derivados de su estancia en prisión, y encuentran incómodo compartir un espacio tan íntimo.

«Tampoco pedimos un hotel de cinco estrellas, porque además de venir de la cárcel somos humildes», aseguró el ex preso Normando Hernández en una rueda de prensa. «Sólo queremos las condiciones necesarias para vivir cómodamente y con privacidad», apostilló.

La pensión, situada en Madrid en un polígono industrial de Vallecas, ha sido calificada por el disidente como «higiénica comparada con las celdas cubanas», y en ella se hacinan las familias al completo.

Varias camas individuales, una taquilla y una ventana es todo aquello de lo que disponen los excarcelados de la Primavera Negra cubana en nuestro país, en las habitaciones donde se refugian para huir del ruido de unos pasillos atestados de voces, carreras, llantos de crío que piden jugo, e incluso preguntas de periodistas insistentes que pasean por allí. Ni hablar de lujos tales como un teléfono, televisor, armarios o aire acondicionado. Tampoco han recibido dinero de ningún organismo para hacer frente a los gastos personales que la libertad les genera a ellos y a sus hijos, más allá del alimento diario.

Este panorama desangelado contrasta con la actitud de algunos cubanos afincados en España que se han acercado durante estos días al hostal para mostrar su solidaridad y cariño hacia sus compatriotas, expresándoles su admiración y charlando con ellos. Algunos, incluso, les ofrecen dinero para un café o unos cigarrillos. «No conocía personalmente a ninguno de ellos, pero son unos héroes de Cuba y he venido a mostrarle mis respetos», comentaba un joven cubano que charlaba ayer con el ex preso Julio César Gálvez.