Gran expectación en Palestina ante la intervención de Abás en la ONu

La plaza, llena de palestinos de todas las edades, sobre todo varones, reflejaba un ambiente de fiesta con motivo del histórico discurso de Abás, tras el que tiene previsto presentar la petición de Palestina para ser admitida como miembro de pleno derecho en la ONU.

Balcones llenos de periodistas y cámaras de televisión orientadas a la también conocida como Plaza del Reloj, reflejaban el interés mundial por los acontecimientos en Ramala, ciudad en la que ondean hoy miles de banderas palestinas y de la campaña de apoyo a Abás con los números 194.

El cierre de comercios -están abiertas sólo las peluquerías y tiendas de recuerdos que están haciendo su agosto con la venta de banderas y la pañoleta palestina (kefia)- ha teñido la jornada con un ambiente de auténtica fiesta nacional.

Sin embargo, es notoria también la sensación de decepción por la postura de rechazo de Estados Unidos a la petición palestina.

"No vamos a conseguir los nueve votos (necesarios en el Consejo de Seguridad) porque Estados Unidos está presionando mucho para no tener que usar su veto", dijo a Efe Yihad Fayad, de 31 años y residente en Ramala.

Pesimista sobre el futuro de la petición, el palestino se mostraba sin embargo exultante por el hecho de que "hoy es el día de Palestina"y porque "todo el mundo habla hoy de Palestina".
En las horas anteriores al discurso de Abás, distintos representantes políticos han dado discursos a los manifestantes, mientras las iglesias de Cisjordania conmemoraban el día a las 18.00 hora local (15.00 GMT) con el repicar de sus campanas y misas especiales.

El poco espacio entre las banderas lo rellenaban pancartas multicolores en las que se recrimina al presidente estadounidense, Barack Obama, su rechazo a la iniciativa palestina y en las que le instan a "tomar partido por la justicia"

Otros eslóganes son "Ha llegado el momento de una Palestina libre", "La ocupación es un crimen", "El derecho a un hogar es uno de los derechos humanos", y "La autodeterminación es un derecho nacional".

La concentración es vigilada de cerca por cientos de agentes de la Policía palestina, que se ha desplegado por toda la ciudad para evitar cualquier brote de violencia, o que puedan marchar hacia zonas bajo control israelí fuera de la ciudad, informó la televisión israelí.
Fuera de la ciudad, las carreteras controladas por Israel contaban con gran presencia militar y policial, como así también los accesos a los asentamientos.