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El incendio que arde desde el jueves en Huesca amenaza a Cataluña
BARCELONA- Los incendios siguen sin dar tregua a los bomberos de la Generalitat. Si ayer una cincuentena de dotaciones seguían trabajando en los fuegos de Girona y el Pirineo de Lleida, cuatro aviones de los bomberos de la Generalitat y otras cuatro dotaciones terrestres se sumaron a los trabajados para controlar el incendio que desde el jueves afecta a la comarca de La Ribagorza (Huesca) puesto que se acercaba a la provincia de Lleida y era el más activo de todos.
La Generalitat informó que el fuego amenazaba al término municipal de Vilaller (Lleida), donde viven unas 600 personas, aunque las llamas estaban lejos del núcleo urbano. Este fuego comenzó el jueves y ayer los bomberos se emplearon a fondo en la población de Castanesa, cuyo término municipal limita con Vilaller. Los últimos días un centenar de personas de poblaciones de la comarca de La Ribagorza han tenido que ser desalojadas por este incendio, que, según explicó la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, pudo empezar con una chispa.
Por su parte, ayer entró en fase de control el incendio que afecta a los municipios de Santa Cristina d'Aro y Llagostera, en que trabajaban 18 dotaciones terrestres y un helicóptero. También estaba en fase de control el fuego de Gerri de la Sal, en el Pirineo de Lleida, mientras que los otros focos pirenaicos –Calbinyà, Viu de Llevata y Montanissell– ya estaban controlados, aunque los bomberos seguían remojando la zona.
Las condiciones metereológicas de sequía y viento obligan a los agentes a no bajar la guardia. De hecho, agentes rurales y bomberos tienen en máxima alerta a todos sus efectivos realizando tareas de prevención y vigilancia en todo el territorio. La Dirección General de Protección Civil de la Generalitat mantiene en fase de emergencia el Plan Infocat por la situación de riesgo de incendio que afecta a toda Cataluña y pide extremar las precauciones.
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