Parados de larga duración

Plan de Empleo Sindical por Martín Prieto

La Razón
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En España gobiernos, oposiciones, financieros, voluntaristas con muy poco dinero, menestrales del optimismo, la itimerata, han creado muchos o pocos puestos de trabajo. No pocos hasta se han creado su propio tajo individual. Sin embargo, resulta imposible conocer cuántos trabajos han creado las dos grandes, todopoderosas y multimillonarias centrales sindicales UGT y CC OO. Los sindicatos son necesarios en cualquier sociedad civilizada. Incluso podríamos hacer el esfuerzo de que tal como si fueran ONG vivan del subsidio del Gobierno y de todos los españoles seamos afiliados o no. El problema aparentemente irresoluble que padecemos con UGT y CC OO es que no han salido de los comienzos del siglo XX y continúan pesadamente siendo correas de trasmisión de la izquierda, en una interpretación cochambrosa del leninismo, particularmente del Partido Socialista y cuarto y mitad del grupúsculo de Izquierda Unida. Sufren además de trastorno bipolar, hoy tan en boga, porque se comportan como si añoraran los Sindicatos Verticales del franquismo donde practicaron el entrismo trostkista. En cuanto les rascas aparece sublimininalmente la Revolución Nacional Sindicalista. Estos dos grandes chupadores del Estado nunca han hecho nada útil por los parados, por los que gimen, porque su negocio está en los empleados. Comparados con los principales sindicatos europeos, Méndez y Toxo son dos paletos con coche oficial. Durante siete años ¿no fue Méndez quien no salía del Palacio de la Moncloa inspirando la economía de ZP que nos llevó a más de cinco millones de parados? Ahora su argumento es: «¡Leches!».