CRÍTICA DE CINE / «The tourist»: El turista accidentado

Si Alfred Hitchcok levantara la cabeza soltaría una carcajada maliciosa antes de morirse de nuevo al comprobar cómo, tantos años después, sus colegas de profesión continúan emulando, que la palabra copiar suena bastante fea, al mago del suspense. Pero sin el turbio y divertido ingenio del socarrón inglés, claro. Como Von Donnersmarck, el autor de aquel duro filme sobre la Alemania del Este titulado «La vida de los otros» que ahora ha decidido cambiar el norte, enfilar la góndola hacia la bella Venecia y contar la rocambolesca historia de un turista americano medio lerdo (Johnny Depp, que protagoniza las mejores y más cómicas escenas del filme, incluidos varios «gags» en español) y la enigmática mujer que lo aborda durante su viaje a Italia interpretada por una atractiva aunque ausente Angelina Jolie. Elegante, glamurosa, entretenida (aviso: sólo para quienes decidan apechugar con el «macguffin» ideado por los guionistas de la película y, sobre todo, digerir de buena gana la increíble piedra angular en la que reposa el filme) y perfecta, totalmente vacía, resulta una alegre, frivolona y vistosa fritanga nacida al abrigo de clásicos como «Con la muerte en los talones» y «Charada». El alemán, que tiene de tonto lo mismo que de bajito, sabe que con este par de estrellas en el cartel la taquilla, e incluso varias candidaturas a los Globos de Oro, estaba asegurada. Agradezcámosle, sin embargo, y en medio de estos tiempos confusos de carteleras invadidas por el 3D y múltiples títulos de dudosa catadura, este inofensivo regalito de Navidad. Desde luego, nada que objetar a su brillante, ostentosa envoltura. Ahora bien, lo que a cada uno le parezca luego lo que descubre debajo del celofán...