Cocinero de profesión atracador en su tiempo libre

 No tenía antecedentes, no estaba fichado y no dejaba huellas. Tras su detención intentan demostrar que "Bravo"es Manuel Amancio, el espléndido amigo del bar que invitaba a los desayunos. El mismo que mató a la cajera el aciago día que decidieron asaltar la sucursal de Cambrils.

En los registros los investigadores hallaron ropas utilizadas en los asaltos. Ni rastro de las pelucas y demás postizos, al proveedor del atrezo le siguieron pero no había encargos, la banda tenia miedo y permanecía oculta tras su doble vida. Jhonny, el jefe, dejó de viajar y se dedicó a cuidar de su hijo pequeño.

Cauteloso, no cruzaba más de dos palabras con los vecinos, que especulaban con su profesión. El dinero de los atracos no daba para tanto y la banda pensó en reorganizarse, pero sin Bravo, les traería problemas, estaba quemado tras la muerte de la cajera. Ya no importaba esperar, si el cocinero no salía de la cocina era mejor ir a buscarlo.

A disposición judicial
Amancio Álvarez y el resto de sus compañeros, que cometieron decenas de golpes en la cornisa cantábrica y Cataluña y mató a la cajera de Cambrils (Tarragona) en octubre, han pasado esta mañana a disposición del Juzgado de Instrucción 3 de Reus, han informado fuentes policiales.

Los cinco integrantes de la banda más importante de atracadores de bancos de España fueron arrestados este martes en una operación conjunta de los Mossos d'Esquadra, la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Ertzaintza.

Los detenidos en la operación 'Cornisa' son cinco españoles de 35 a 54 años, además de que otros dos presuntos miembros de la banda ya estaban en prisión por delitos similares.
Entre ellos 'Bravo', aunque no el cómplice que iba con él ese día y que filmaron las cámaras de seguridad del banco, en una imagen de ambos con pelucas, gafas y una gorra.

Desde el crimen, los dos estaban entre los fugitivos más buscados por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y su foto se difundió en los medios de comunicación. La banda estaba perfectamente organizada y su cabecilla, 'Johnny', ordenaba cómo actuar a sus compinches, llegando a cometer un atraco por mes, siempre en parejas y a mano armada.

Todos los detenidos son delincuentes muy peligrosos y forman un grupo criminal especializado en métodos de caracterización, lo que les ha permitido perpetrar diversos atracos a cara descubierta sin ser identificados.