Nicolás Sarkozy

Un rumor libra a la Bolsa de cerrar en los mínimos de 2009

 La consigna es clara: «vender todo lo relacionado con el euro». Y los inversores la ejecutaron ayer con maestría. La crisis de deuda no perdonó ni a Alemania, que vio cÓmo su bono a diez años, el siempre halagado «bund» como símbolo de la solvencia de la zona euro, se disparaba otra vez en el mercado secundario.

Un rumor libra a la Bolsa de cerrar en los mínimos de 2009
Un rumor libra a la Bolsa de cerrar en los mínimos de 2009larazon

En Bolsa, los principales índices europeos se desplomaron por la mañana a niveles de hace dos años y sMADRID- La consigna es clara: «vender todo lo relacionado con el euro». Y los inversores la ejecutaron ayer con maestría. La crisis de deuda no perdonó ni a Alemania, que vio cÓmo su bono a diez años, el siempre halagado «bund» como símbolo de la solvencia de la zona euro, se disparaba otra vez en el mercado secundario.

En Bolsa, los principales índices europeos se desplomaron por la mañana a niveles de hace dos años y sólo la apertura de Wall Street y un rumor comunitario tras la jornada de Acción de Gracias devolvió a los inversores la voluntad compradora.

No se libra nadie

El contagio de la crisis del euro ya es global, y no se libran ni Francia ni Alemania, antaño compañeras de viaje en el rescate de la moneda única y ahora enfrentadas por la fórmula que nunca llega para salvar la solvencia de 17 economías.

La división es tal, que al cierre de los mercados surgió el rumor de que Mario Monti y Nicolas Sarkozy piensan cerrar la puerta a la participación del sector privado en el nuevo fondo de rescate europeo (que sustituye al actual, Fondo Europeo de Estabilidad Financiera).

Este «clavo ardiendo» permitió que los índices recuperaran posiciones tras una sesión de auténtico infarto en la que la subasta de deuda de Italia hizo prever una jornada negra en los mercados. No en vano, la financiación de los estados está en niveles insostenibles.

El Tesoro transalpino colocó 10.000 millones de euros en deuda a seis meses y dos años, pero para atraer la atención de los inversores tuvo que elevar el interés ofrecido hasta cotas de récord. En los bonos con vencimiento a medio año, Italia pagó un cupón del 6,5% –un 84% más que en la anterior emisión– para captar 8.000 millones.

En el caso de los títulos con vencimiento en 2013, la rentabilidad se disparó un 69% (7,814% frente al 4,628% anterior). Tras conocer el resultado de la emisión italiana, el Ibex 35 llegó a tocar suelo a las 12 del mediodía en los 7.600 puntos, por debajo del mínimo anual registrado el 12 de septiembre y en niveles de hace dos años, aunque luego remontó y al cierre se anotó un 0,54%, en línea con el resto de plazas europeas.

En la tercera peor semana del año, el principal selectivo del parqué nacional acumuló una caída del 6,58%. En las primeras posiciones bajistas de los últimos cinco días se situaron los bancos, como de costumbre.

Los analistas creen que los mercados perforarán en las próximas jornadas los mínimos anuales, ya que no parece haber nada positivo que indique que los líderes europeos lograrán solucionar la crisis de la moneda única. Merkel se opone a los eurobonos –de momento, a la espera de ver cómo evoluciona su deuda a diez años, y tampoco quiere que el Banco Central Europeo (BCE) tenga más funciones.

Si el resto de países no consigue ganar ninguna de estas batallas, los inversores recrudecerán su ataque sobre el euro. Además, ayer parte del Eurogrupo se mostró en contra de ampliar el fondo de rescate europeo en un billón de euros por considerarlo «poco realista».

Bélgica pierde rating
El rodillo de la crisis de deuda europea no para de ganar fuerza espoleado por las agencias de rating. Ayer, Standard & Poors (S&P) rebajó la nota de solvencia de Bélgica ante la mala situación de su sector financiero. El rating del país pasa de «AA+» a «AA», con perspectiva negativa, ante las dificultades de la banca para captar capital y el coste que tendrá el rescate para el sector público belga.

Miren donde miren los inversores en la zona euro, todo son malas noticias. Desacuerdos, problemas de financiación, rebajas de solvencia, bancos en apuros, altas tasas de desempleo y previsiones negativas.


«Si cae Italia, cae el euro»

La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, reconocieron el pasado jueves en su encuentro con el primer ministro de Italia, Mario Monti, que «la caída de Italia» significaría «inevitablemen- te» el final del euro. Según un comunicado difundido ayer por el Ejecutivo italiano, «Sarkozy y Merkel expresaron plena confianza en el presidente Monti y en su Gobierno y manifestaron su apoyo a Italia, asegurando que la caída de Italia tendría consecuencias imprevisibles».

Eurobonos mancomunados

La cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los próximos días 8 y 9 de diciembre en Bruselas abordará el tema de los llamados eurobonos mancomunados, una solución transitoria para la crisis de deuda soberana, que no exige reforma de los tratados como los eurobonos. En estos títulos, cada país responde con el porcentaje correspondiente a su participación en el Banco Central Europeo –un 12% en el caso de España–, al que hay que añadir la parte correspondiente a los tres países rescatados, Grecia, Irlanda y Portugal, por lo que España tendría que respaldar, con alrededor del 15% de las emisiones de deuda.