«Las estrellas también se estrellan»

–Tiene usted aspecto de deportista … ¿Qué deporte practica?
–Tres cosas que hay en la vida: fútbol, correr y abdominales, como Aznar, con quien me llevo muy bien.

–¿Es verdad que es un futbolista frustrado?
–Sí, como Julio Iglesias y Antonio Banderas. Lo tuve que dejar por una lesión y lo añoro, por eso todos los años hago un partido benéfico en el que participan muchos artistas para los niños.

–Tiene en su haber grandes «goles» como el de haber presentado a Rául y Mamen o a Arancha y Guti. ¿Se lo han agradecido?
–Sí. Mantengo relación con ellos desde entonces. Incluso ahora que esos dos genios, los Zipi y Zape del deporte, se han ido del Madrid, seguimos manteniendo el contacto.

–De todas las personas del mundo del deporte con las que ha trabajado, ¿diría que el más grande es Nadal?
–Es el mejor de todos los tiempos. Soy su fan número uno. Es mi ídolo y mi amigo. Tengo su raqueta firmada.

–Y el vestido de Norma Duval, los zapatos de Julio Iglesias, los botines de Joaquín Cortés…
–Sí, con el tiempo me gustaría hacer un museo para que todo el mundo lo pudiera ver.

–Dicen que Richi Castellanos tiene los teléfonos de todo el mundo. ¿Algún deportista se lo ha negado?
–De momento no, pero tampoco tengo los de todos. Procuro sacar cada día uno más, porque siempre salen nuevos deportistas.

–Y usted que conoce a deportistas y artistas de todo tipo, ¿los trata según su importancia?
–Yo pienso que las personas son personas, cada uno es profesional de lo suyo y yo los trato a todos por igual. Para mí nadie es más que nadie. Siempre he dicho que las estrellas también se estrellan. Y más vale un amigo que un enemigo en cualquier circunstancia.

–¿Cuál es su secreto para que le conteste el teléfono desde Casillas a su novia Sara Carbonero, pasando por Nadal y Santana, hasta José María Aznar, Santiago Segura o Ana García Obregón?
–Pues mantener una amistad duradera y darles todo a cambio de nada, sin que ellos me lo pidan. Gracias a ello llevo 18 años de trayectoria en el mundo del espectáculo. Eso es mi premio.

–Y usted premia a los artistas con el famoso «cero coma cero», ¿no?
–Sí, «cero coma cero» significa que me gusta invitar a todo a los artistas. Y como sé lo que les gusta a cada uno, se lo doy desinteresadamente y con cariño.

–A usted le gusta el fútbol, pero en la vida parece más de deportes individuales porque todo lo hace solo, ¿no?
–Sí, como el Llanero Solitario… Lo que hago yo, sólo lo sé yo. Pero si tuviera una secretaria, podría comentarlo si de pronto no estuviera conmigo… Por eso yo prefiero tener siempre la soledad porque así lo que haga yo con el artista o el deportista sólo lo sabemos él y yo.

–Y dígame, teniendo amigos en todos los equipos de fútbol, ¿de cuál se considera usted?
–El mejor equipo del mundo es el Real Madrid.

–¿Y cuál diría que ha sido su mejor gol profesional?
–Conocer a toda la gente que he conocido, que me gusta más estar con vosotros que que me hubiera tocado la lotería. Si me hubiera tocado la lotería seguro que estaría en las Bahamas con dos chicas abanicándome, pero no hablaría con Joaquín Cortes, ni Enrique Ponce ni con Tomatito, ni con …


En primera persona
«Nací en Madrid en 1968. Estoy soltero, no tengo hijos, me siento orgulloso del apoyo de mi familia y de tener salud, y no me arrepiento de nada. Valoro la amistad y las personas que miran de frente, detesto que los que viven bien no piensen en la cantidad de gente que pasa hambre y que eso se podría arreglar… Soy tenaz, perfeccionista, profesional; perdono si no ha habido intención, como Dios perdonó a Judas, y olvido siempre que no sean cosas muy duras, aunque me cuesta. A una isla desierta me llevaría a una mujer rubia con ojos azules, 90-60-90, pero que tenga inteligencia, porque si después del acto sexual, que es lo único que tienes en una isla, te habla de Espinete y Superman, me aburriría como una ostra. Me gusta comer la tortilla que hace mi madre y beber mi droga de día y de noche: colacao con galletas. No tengo manías; mi sueño hubiera sido cantar con Camarón de la Isla y Paco de Lucía, que son mis ídolos. De mayor me gustaría ser futbolista y si volviera a nacer sería futbolista».