Bogotá

Las FARC intentaron con ayuda de ETA matar al presidente colombiano

Expertos antiterroristas españoles, consultados por LA RAZÓN, dan plena credibilidad a los planes de las FARC (con la ayuda de ETA), descubiertos por las Fuerzas de Seguridad de Colombia, para atentar contra la toma posesión del presidente electo de aquel país, Juan Manuel Santos, el pasado 7 de agosto.

Las FARC intentaron con ayuda de ETA matar al presidente colombiano
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Dentro de la colaboración existente entre ambas naciones, tienen previsto solicitar datos de los morteros encontrados (con los que iba a ser perpetrada la acción criminal) y de los sistemas que contienen, con el fin de confirmar que se trata de la «patente» del arma inventada por la banda terrorista española, utilizada en dos atentados, en Soria y Navarra.

«Por lo que sabemos hasta ahora, no se trata de un plan esbozado sobre unos papeles, sino que las armas habían sido ya preparadas; el piso desde el que iban a ser lanzadas, comprado; y el resto de preparativos, ultimados». A este respecto, recordaron la colaboración que las FARC y ETA mantienen desde hace años, acreditada en documentos que se han incautado a ambos grupos.

El perfeccionamiento de un mortero, que la banda española denominaba «Jotasu (o Jotake)-Haundia», formó parte de dicha colaboración. Este artilugio lanza bombonas de butano cargadas de explosivo, con un enorme poder destructivo. Tiene que ser utilizado contra grandes edificios, que no estén a demasiada distancia, o acuartelamientos aislados en el campo, ya que el tiro no es muy preciso. Los artefactos hallados en Colombia son, al parecer, de este tipo. El plan de los terroristas fracasó porque las Fuerzas de Seguridad lo descubrieron tres días antes de que se llevara a cabo, según informó la cadena CaracolTV. La Fiscalía General señaló, por su parte, que un informante había puesto en conocimiento de las autoridades los preparativos y había entregado una serie de documentos manuscritos de las FARC con los detalles del atentado que se preparaba. El ministro del Interior y de Justicia, Germán Vargas, dijo que había sido «una fortuna» que no se hubiera consumado el atentado porque hubiera sido una «tragedia». Al acto de toma de posesión asistían altos representantes de varios países, entre ellos el Príncipe de Asturias, don Felipe de Borbón.

Instructores

Los documentos que se incautaron describen los detalles del atentado y mencionaban la participación de instructores de ETA en los preparativos, iniciados el pasado mes de abril. La acción criminal consistía en el disparo de cinco bombonas con morteros artesanales contra la plaza de Bolívar, donde se encuentra la sede de la presidencia de Colombia, el Palacio de Nariño, coincidiendo con la toma de posesión de Juan Manuel Santos, «Chucky», como la apodan los de las FARC.

En un comunicado enviado por la dirección de este grupo a todos sus «frentes», que fue encontrado en el piso desde el que se iban a lanzar las granadas-bombona, se indicaba que el plan, denominado «Unidos como deber ser», contaba con el apoyo de miembros de la banda terrorista española. «Los instructores que nos envió la ETA ya están en el campo dando las instrucciones. El personal ya fue seleccionado. Son 250 unidades que reciben las instrucciones y los simulacros debidamente establecidos, perfeccionados y con tecnología punta», agregaba.

Los dirigentes de las FARC informaban de que el piso desde el que iban a a ser lanzadas las granadas ya había sido comprado (en el barrio de Las Cruces) y los morteros habían llegado a la ciudad. «La compra fue hecha por el comandante Toño (...) Está muy cerca del objetivo. Los topógrafos y el ingeniero civil ya están sacando los datos para ingresarlos al sistema», se explica. En el comunicado se indica además que se están realizando los trabajos para el acoplamiento de las bases giratorias de los cinco morteros, ya que deben estar incrustados en el suelo para que, al ser activados, no se pierdan las coordenadas de tiro. «Los disparos se harán secuenciales y a control remoto».

Cuba, punto de encuentro

ETA y los terroristas de las FARC han colaborado en el desarrollo de morteros artesanales desde principios de los años noventa. También el IRA ha enseñado al grupo criminal colombiano técnicas de fabricación de sistemas caseros de lanzamiento de proyectiles a partir del empleo de bombonas de gas, informa Vasco Press. Documentos intervenidos al «aparato político» de ETA en París en 1993, pusieron de manifiesto que, a finales del año anterior, ETA había pasado a las FARC los datos técnicos de los morteros «Jotasu-Haundia». El punto físico de intercambio había sido Cuba, donde cabecillas ETA se citaron con dirigentes de las FARC.


Una acción criminal repetida
- El atentado frustrado por las autoridades de Bogotá es similar al que las FARC cometieron el 7 de agosto de 2002, coincidiendo con la toma de posesión de Álvaro Uribe como presidente de Colombia. Los terroristas bombardearon el Palacio de Nariño, sede de la presidencia, con cohetes. Los proyectiles se desviaron y cayeron en barrios populares de Bogotá, causando la muerte de 17 personas.
- Dentro de la colaboración entre ETA y las FARC, los ensayos del mortero se realizaron en la selva de Venezuela. En sus documentos, ETA había puesto a este asunto el nombre clave de «gabardina».