Sevilla

Alberto Fabra: «Zapatero nos ha ninguneado simplemente por ser del PP»

Se le nota entusiasmado y, a la vez, preocupado con la responsabilidad adquirida. Da la impresión de prudencia y, simultáneamente, de tener las cosas claras. El municipalismo le ha marcado. El servicio al ciudadano, el ajuste del gasto público como reflejo al realizado por las familias y las pymes constituyen una referencia permanente. Alberto Fabra, alcalde de Castellón desde 2005 y concejal desde 1991, ya piensa en Comunitat.

 
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-Recibir a las víctimas del Metro, entregar los papeles de Gürtel a la oposición y hablar con Ripoll forman un trípode llamativo ¿quería marcar diferencias de entrada?
-No. Es una consecuencia de mi trayectoria municipalista. Al final nadie puede eludir un problema. Hay que sentarse, escucharlo y dar las soluciones oportunas. Que nadie pretenda que aquí por el hecho de tener una reunión, va a encontrar un discurso o una solución distinta a lo que otros les han podido decir. Me voy a limitar a escuchar, recabar la información, convencido de que mis compañeros han hecho lo que tenían que hacer en todos los casos. Tanto a nivel interno, como en una situación delicada como la del accidente del Metro. Estoy muy satisfecho y orgulloso del trabajo realizado por mis compañeros de partido en estos años. Máxima dedicación y consiguiendo lo mejor para la Comunitat en posiciones extremas, con falta de financiación. No me niego a recibir a nadie, pero que nadie piense otra cosa. Aquellas cuestiones sensatas y lógicas deben ser atendidas y estudiadas por parte de cualquier Gobierno. No va en contra de lo hecho por mis compañeros, con los que me siento satisfecho e identificado. En cuanto al partido, lo mismo. Si se concluye que algo se ha hecho mal, se soluciona. El PP es un partido que convive con un proyecto de forma leal y solidaria, a diferencia de lo que tiene el PSOE.

-¿Qué ha pasado en la Comunitat para que la crisis se haya cebado en sectores tradicionales?
-Nosotros somos una economía muy dinámica. Por ello, a la hora de enfrentarse a una crisis, la sufrimos más que otras. Pero somos más capaces de salir con mayor rapidez. Hemos sufrido en mayor medida el efecto, pero ahora estamos trabajando para generar los instrumentos necesarios para salir cuanto antes. Lo haremos con más rapidez que otras comunidades.

-¿Es optimista con la perspectiva del paro?
-Sí, pero siendo consciente de lo que supone el desempleo. Cada estadística del paro es una resignación de una familia que ve cómo uno de sus miembros deja de tener actividad. Con esa realidad y dramatismo es como tenemos que luchar contra el paro y ofrecer dinamismo. Estamos hablando de personas, no de números. Hay que favorecer a las empresas para que generen empleo.

-Con esta buena relación con Rajoy, ¿su designación es de largo recorrido o tendrá la tentación de aceptar una llamada suya?
-No, no, no. Este proyecto es un compromiso a largo plazo. No puede ser de otra manera. Estoy convencido de que vamos a seguir siendo un referente a nivel nacional e internacional. La Comunitat Valenciana está preparada para asumir cualquier reto. Hemos sabido ajustarnos el cinturón y aguantar el chaparrón que ha caído estos años. La fuerza y la seguridad de los valencianos van a hacer que sigamos siendo la guía de cómo se puede salir de la situación actual.

-¿Cómo será si hay empresas en dificultades por las deudas de la Administración?
-No nos vamos a frenar. Sé que se han producido situaciones complicadas, especialmente con los proveedores. Con el plan de reequilibrio financiero, se nos va a permitir emitir deuda. Si podemos sacar esa deuda, entre septiembre y octubre, garantizamos el pago a los proveedores, a los cuales debo agradecer la paciencia. Soy consciente de la mala situación que atraviesan. He dado orden a los consellers de Economía y Hacienda para que trabajen en la colocación de esa deuda.

-Zapatero se va ¿qué piensa?
-Muy negativo para la Comunitat. En financiación y en infraestructuras. El AVE ha llegado a Valencia 20 años después que a Sevilla. A Alicante y Castellón aún no. El Gobierno de Zapatero no ha sido leal con la Comunitat, sobre todo por estar gobernada por el PP. Han sido unos años en los que se ha mantenido el reto del futuro gracias a nuestra propia inversión. Nos ha ninguneado simplemente por no ser del PSOE.

-Otra de las imágenes negativas ha sido la CAM ¿qué ha pasado para que la Comunitat se haya quedado sin entidad financiera propia?
-La situación financiera de este país ha sido muy convulsa. Las Cajas de Ahorro se han tenido que unir para hacer frente al escenario. Lo ha hecho Bancaja y eso es lo que intentó hacer la CAM. Respetamos lo que son los órganos de administración y de gobierno, pero exigimos que haya el flujo de dinero necesario para apoyar a las pequeñas y medianas empresas. Lo que debemos procurar es que haya esa financiación fácil a las pymes. Si no es con la ayuda de todos, ese motor empresarial no va a poder seguir adelante. En este momento, las entidades financieras han recortado esa financiación. Deseo que la CAM siga manteniendo ese compromiso con el territorio y con las pymes.

-Todos los presidentes del PP que han relevado al PSOE en las autonomías están denunciando agujeros económicos, facturas y deuda no contabilizadas ¿aquí le ha pasado lo mismo?
-No. Nosotros tenemos, como todos, tensiones de tesorería. El problema es que ha faltado financiación sistemática por parte del Gobierno central. Casi mil millones al año son los que nos ha estado ninguneando, porque estamos dando servicios a cinco millones de ciudadanos y sólo recibíamos financiación para cuatro. Eso hace que tengamos dificultades a la hora de afrontar nuestros compromisos. Ahí están las cuentas. Somos un ejemplo de compromiso con el territorio y con la necesidad de seguir creciendo.

-Hay autonomías que se disponen a cerrar algún hospital ¿también en la Comunitat?
-No. Son situaciones que no se deben producir, porque es una merma de servicios a los ciudadanos. La Administración ha de ajustar otros capítulos antes de plantearse recortar servicios. Antes de recortes, hay que adelgazar a la Administración.

-¿Cuál es el futuro de Canal 9?
-Como con todas las instituciones, organizaciones y empresas públicas, debe ajustarse. Como han hecho las pyme y las familias. En la Administración no se ha producido con la misma contundencia. Habrá que reestructurarla a las necesidades de ahora, pero hay aspectos irrenunciables. Canal 9 debe fomentar el uso del valenciano y eso tiene que seguir. Debe ser plural y debe acercar la realidad cultural y tradicional de la Comunitat, para que la gente se sienta más identificada. No tiene que ser un problema, sino un instrumento al servicio de los ciudadanos

-¿La idea es la que se ha publicado, la de 1.200 despidos?
-Ya veremos. Vamos a hacer ajustes para acomodarlos al momento. La actual situación de Canal 9 es inviable. Esos ajustes se pactarán con los agentes sociales, para buscar una solución de supervivencia. Como todo el mundo. Si no es así, no saldremos adelante. Respecto a la TV3, soy partidario de que se vea no sólo la catalana, sino las de las comunidades vecinas. Parece mentira que con un ordenador podamos ver todas las televisiones del mundo y aquí estemos enfrentados. Lo que tiene que hacer el Gobierno central es dotarnos del mismo número de canales, como tiene Cataluña.

-¿Alfonso Rus es un problema?
-En absoluto. Es un apoyo necesario, un compañero de partido comprometido como pueda estar yo. En su día se quejó de unas formas en unas jornadas que fueron muy ajetreadas.

-Resulta extraña su declaración de que consultará con él el nombramiento de altos cargos de la Generalitat …
-No sólo con él. El proyecto nuestro es de mucha gente, de muchas personas que están colaborando. Quiero que la estructura potente de nuestro partido me ayude a poner a las mejores personas para que este proyecto sea el mejor posible. Quiero el asesoramiento de quienes más saben.

-Los castellonenses dicen que les ha llegado su hora ¿de verdad piensan que han sido discriminados por la Generalitat?
-Bueno, somos la provincia más pequeña y hemos visto que grandes infraestructuras se han ido a Valencia y a Alicante. Algunas cuestiones precisan más atención. Es verdad que el aeropuerto de Castellón es una excelente oportunidad para los castellonenses, porque podrá potenciar el turismo, un sector que está manteniendo el tipo en este momento y puede generar mucho movimiento para conocer la Comunitat a través de esta provincia.

-¿Va a «castellonizar» la Generalitat?
-Soy de Castellón y es una condición que se mantendrá siempre. Voy a mantener la residencia en Castellón y eso hará que se hable más de esta provincia. Todas esas cosas van a darle más protagonismo. Eso es bueno. Ha habido presidente de Alicante, de Valencia y ahora de Castellón.

-Habla mucho de municipalismo ¿se puede municipalizar la Generalitat?
-Yo creo que sí. El espíritu municipalista es bueno en cualquier Administración. Desde los ayuntamientos se tratan los temas de forma personalizada. Poniéndoles cara. Eso es bueno porque te ayuda a racionalizar lo que son las decisiones, hacerlas más entendibles para los ciudadanos. Ese espíritu municipalista siempre tiene que estar presente en cualquier decisión. Voy a intentarlo.

-¿El destino de Joaquín Ripoll es la presidencia del Puerto de Alicante?
-Ripoll es una persona que ha tenido grandes responsabilidades políticas y de gestión. Creo que todavía tiene que aportar cosas al proyecto del PP y que eso sirva para unificar y eliminar ciertos problemas que algunos han querido ver. Hay que estar para sumar, no para restar.

-¿No había otra solución que dejarle sin delegación y sin sueldo?
-Lo que ha sido, ya es pasado. Tenemos que trabajar todos. Voy a intentar que todas las personas que puedan ayudar en beneficio de los ciudadanos sigan estando al frente de instituciones y administraciones. Si además logramos que el partido esté más unido y más fuerte y que ciertas cosas que han sucedido en los últimos años se dejen aparcadas, mejor. Para hacer un proyecto potente de Comunitat, necesitamos un partido fuerte, que genere esas fortaleza a la propia institución, donde no haya personas que puedan sentirse incómodas. Es para lo que voy a trabajar.

-Da la impresión de que ya tiene algo en la cabeza para Ripoll.
-Para Ripoll y para otras personas. Ahora se centraliza todo en Ripoll. Ya sé que ahora está de moda en Alicante, pero lo importante es sumar. Hablamos de compañeros. Lo que quiero es que todos trabajemos unidos, en buen ambiente.

-¿Tiene en mente una remodelación del Consell después de las elecciones?
-No. He dicho que confío en todos los miembros del Consell y que en este momento necesito la profesionalidad, dedicación e ilusión de cada uno de ellos. Como presidente, lo necesito para seguir trabajando por los valencianos.


Natural y firme
El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, rebosa naturalidad. Casado con Cristina Fortanet, arquitecta ejerciente en Castellón, es padre de dos hijos, Alberto (16) y Cristina (11). Amante de las cosas normales, habituales en cualquier persona. Este castellonense de 47 años necesita acompañar a su hijo para verle jugar al fútbol, estar con la familia y con los amigos. Amante del deporte, practica baloncesto, natación (casi por prescripción facultativa), bicicleta, pádel ... Casi sin tiempo para la lectura. Para el escaso tiempo libre prefiere la distracción. Da la impresión de abordar la gestión de la Comunitat con prudencia y, a la vez, con firmeza. Conoce más el entramado de la Comunitat que la impresión que quiere dar y parece subyugado por lograr la pacificación y unidad del Partido Popular. Sumar, sumar y sumar. Los demás, todo para superar la crisis.