El Gobierno boliviano sube entre el 57% y el 82% el precio de los combustibles

El vicepresidente del país, Álvaro García Linera, que ejerce la presidencia interina, y el Consejo de Ministros informaron en el Palacio de Gobierno del nuevo coste de las gasolinas y el gasóleo, además de otras medidas que puedan mitigar una decisión de ese calibre en la economía familiar boliviana.

El litro de gasolina sube de 0,53 a 0,91 centavos de dólar (un 72 %), la gasolina premium de 0,68 a 1 dólar (57 %) y el de diesel de 0,52 a 0,96 centavos de dólar (84 %).

García Linera justificó la decisión con el argumento de que era necesario frenar el contrabando a países vecinos de los carburantes que este año recibieron del Estado una subvención de 380 millones de dólares.

Se ha decidido el incremento "para proteger la economía boliviana, para no subvencionar a los contrabandistas, ni a los que tienen cinco carros de lujo", apuntó el vicepresidente.

Según el Gobierno, los carburantes que eran llevados de forma ilegal a Perú, Brasil, Chile y Argentina estaban valorado en al menos 150 millones de dólares.

García Linera explicó además que el barril de petróleo en el mercado interno costaba desde hace siete años 27 dólares, pese a que nivel internacional ronda en la actualidad los 90 dólares, lo que consideró una desincentivación para que las empresas produzcan combustibles líquidos.

Al contrario, se mantiene congelado el precio de la bombona de gas (3,1 dólares) y del gas para vehículos y domicilios.

Para aminorar el impacto de la medida en la economía familiar, el Consejo de Ministros decidió que el aumento al salario en 2011 será superior al de inflación de este año y que los funcionarios de la administración trabajen desde el lunes en horario continuo.

El Ejecutivo boliviano también ha decretado congelar el coste de los servicios básicos, como el agua, el teléfono o la energía eléctrica, y ha anunciado planes de empleo de "emergencia"para los próximos meses.