Asturias

«Los paneles sólo hablaban de cadenas»

Hoteles que registraron entradas «urgentes» de madrugada, empresas de autocares que se vieron obligadas a cancelar salidas y personas que tuvieron que ser evacuadas o atendidas por los servicios de emergencias.

Los conductores se quejaron de la falta de información de la DGT. Ayer la A-6, en la imagen, había recuperado la normalidad
Los conductores se quejaron de la falta de información de la DGT. Ayer la A-6, en la imagen, había recuperado la normalidadlarazon

Madrid- Los miles de afectados por la «ratonera» en la que se convirtió la A-6 la noche del viernes fueron de toda índole. Protección Civil, Cruz Roja, Bomberos y Summa tuvieron que asistir a decenas de viajeros con crisis de ansiedad y trasladar a varias personas de avanzada edad hasta centros de salud y hospitales cercanos. En concreto, un anciano de 80 años volvía de someterse a diálisis en el hospital Puerta de Hierro de Majadahonda y, tras encontrase indispuesto, Protección Civil de Las Rozas le trasladó a un centro de salud de Las Matas. Una mujer diabética y otra de avanzada edad también fueron evacuadas. En el lugar se atendió a viajeros con bebés a bordo y vehículos que se habían quedado sin batería y necesitaban mantas. Hubo incluso una decena de conductores que optaron por dejar sus coches atrapados «abandonados», y que tuvieron que ser retirados por la grúa. Pero, afortunadamente, el grueso de los afectados fueron simplemente conductores indignados con la mala gestión de la situación y que tuvieron que resignarse a llegar varias horas más tarde a su destino. Es el caso de Enrique, un madrileño que trabaja en Zamora y volvía el viernes a casa. Tenía claro el culpable del caos. «Fomento e Iberpistas debían haber informado en el peaje con sentido a Madrid, cosa que no se hizo hasta que ya fue demasiado tarde y la A-6 ya era una "calle"sin salida». «El boletín de tráfico informaba de que el Alto del León estaba cerrado a los transportes especiales y decidí entrar a la AP6 para evitar el puerto. Los paneles de tráfico sólo advertían del uso de cadenas, pero cuando entré en la autopista ya empecé a ver problemas. El atasco asustaba», comenta el madrileño, que llegó a su destino cuatro horas más tarde. Otra de las afectadas se preguntaba ayer cómo podía ocurrir algo así en la carretera de La Coruña. «Es increíble que no previeran esto y encima que te cobren el peaje, ¡qué sinvergüenzas!» Muchos de los afectados fueron residentes en municipios de la Sierra que regresaban de su jornada laboral. Los únicos que sacaron ayer rendimiento a la «ratonera» fueron los hoteles cercanos a la «zona cero» del caos. El NH Florida o el hotel Travelodge de Las Rozas registraron una treintena de entradas imprevistas de madrugada. «Llegaron muy enfadados y hambrientos», aseguró un responsable del centro. Además, algunos empleados tuvieron que quedarse a pernoctar en el hotel.
Alsa tuvo que suspender las salidas de Méndez Álvaro con destino a Asturias, Galicia y Castilla y León y seis autocares procedentes de esa zona quedaron atrapados a la altura de Villalba. Un portavoz habla de «grandes pérdidas» al tratarse de «un viernes y en carnavales».