Castilla y León
Palencia contará con el primer centro sociosanitario de Castilla y León
El recinto, que se ubicará en una parcela al lado de la antigua cárcel palentina, se espera que esté en funcionamiento en tres años y creará unos 70 empleos
Palencia- El Ayuntamiento de Palencia y la Junta impulsan en esta ciudad la puesta en marcha del primer centro sociosanitario específico de la Comunidad que supondrá un cambio en el modelo actual y que beneficiará a los castellanos y leoneses.
El alcalde de Palencia, Alfonso Polanco, el gerente regional de Servicios Sociales, Jesús Fuertes y el gerente regional de Salu, Eduardo García firmaban un protocolo de colaboración, en el que se pretende que «Palencia lidere la atención a las personas a través de un nuevo modelo de atención sociosanitaria que pone a las personas en el centro de la acción pública», señalaba Polanco.
El centro se ubicará en una parcela de 8.000 metros cuadrados al lado de la antigua cárcel de Palencia, tendrá una capacidad de 71 plazas y creará 50 puestos de trabajo a tiempo completo y 20 a tiempo parcial. Tendrá titularidad pública, con un coste global de 7,4 millones, dependiendo del ayuntamiento palentino, aunque la construcción de las instalaciones como su gestión serán privadas, a través de un contrato.
En tres años
En el día de ayer se colocaba la primera piedra, y el objetivo es que antes de que acabe esta legislatura Palencia cuente con un centro multiservicios en el que se adaptará la oferta a las nuevas demandas de los usuarios, garantizando una atención de calidad, la supervivencia de la red de centros y el mantenimiento del empleo en el sector de Servicios Sociales, según indicaba el gerente regional de Servicios Sociales, Jesús Fuertes.
También el gerente regional de Salud, Eduardo García, ha insistido en el «cambio de estrategia» que supondrá este centro para la atención a pacientes crónicos.
De hecho, el centro contará con plazas de atención social y sanitaria para aquellas personas, especialmente mayores, que presenten procesos crónicos de enfermedad, y que necesiten simultáneamente y de forma combinada cuidados sociales y sanitarios de baja intensidad.
Los posibles usuarios serán personas en situación de dependencia que, de forma transitoria o definitiva, o por razones de carácter social, no pueden ser dadas de alta o no tengan garantizada la continuidad de los cuidados en su domicilio. Su puesta en marcha evitará a los pacientes estancias inadecuadas en hospitales.
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