Barcelona

La reunión del BCE toca a su fin en Barcelona sin incidentes destacables

Centenares de policías, de paisano, uniformados y con chalecos antibalas, y decenas de periodistas han coincidido esta tarde en varios puntos de Barcelona en busca de una supuesta manifestación anticapitalista con motivo de una reunión del Banco central Europeo que toca su fin sin incidentes destacables.

Pese a que el movimiento de indignados 15M ya había anunciado que no convocaría ninguna manifestación y se limitaba a convocar las caceroladas nocturnas en rechazo de la reunión del Banco Central Europeo en Barcelona, esta mañana se ha extendido un rumor por las redes sociales de que por la tarde iba a haber una manifestación anticapitalista.

Este rumor, difundido también a través de algún twitter, ha hecho desplegar un dispositivo periodístico que, aunque no tan aparatoso como el policial, se ha dejado ver, con cámaras, fotógrafos y redactores, por la plazas Universidad y Urquinaona, y, sobre todo, por Arco de Triunfo, los tres lugares que se apuntaban en las redes sociales.

En Arco del Triunfo, durante varias horas de la tarde ha habido decenas de furgones policiales con agentes antidisturbios de los Mossos d'Esquadra y muchos policías de paisano con el brazalete de color amarillo fluorescente que estrenaron el pasado martes para ser reconocidos como autoridad, en una táctica policial sin precedentes en Cataluña.

Tras varias horas de paciente espera, porque algunos rumores indicaban que la concentración sería a las 17.30 horas, pero otros la retrasaban hasta las 19.00 horas, en ningún lugar ha aparecido activista alguno para protestar contra la reunión del BCE.

Los periodistas, los furgones y las dotaciones policiales se han ido retirando paulatinamente del centro ante la falta de manifestación a la que controlar, aunque el despliegue de seguridad no ha sido en vano porque los agentes han aprovechado para hacer algunas identificaciones y se ha garantizado la seguridad de la cumbre.

Más de 8.000 policías, entre Mossos d'Esquadra, Policía Nacional y Guardia Civil, han blindado hoy la ciudad de Barcelona con uno de los mayores dispositivos policiales de los últimos años para evitar incidentes durante la cumbre del BCE, que finalmente se habrá saldado sin ninguna protesta, más allá de la huelga de universitarios, que ya estaba convocada.