Felipe estará a tope ante Serbia

Las molestias en el cuello de Felipe Reyes son, junto al juego de Serbia, las dos únicas preocupaciones de Sergio Scariolo. Por lo demás, después de eliminar a Grecia en octavos, la Selección española de baloncesto vive horas tranquilas y felices, saboreando el triunfo y consolidando las buenas sensaciones que dejaron ante los helenos. Los jugadores disfrutaron de un día de fiesta después de celebrar la victoria el sábado por la noche en un restaurante de la capital turca. Todos menos Felipe, que no pudo descansar después de que se le reprodujeran unas molestias en el cuello que ha ha sufrido en otras ocasiones.

El pívot español se resintió durante el partido ante Grecia y el dolor no desapareció en toda la noche. Durante la mañana de ayer tuvo lugar una cumbre médica en la que el jugador desveló su deseo de visitar a su médico de confianza, el que le ha tratado en las diversas ocasiones que ha sufrido estas molestias, y viajar a Madrid aprovechando el día de fiesta concedido por Scariolo. Los servicios médicos de la Federación Española, en contacto con los del Real Madrid, accedieron y el jugador viajó a la capital de España acompañado por Juan Martín Caño, el jefe de equipo de «La Roja».

Reyes visitó al doctor José Fabregat en la Fundación Jiménez Díaz, donde se le trató de su dolencia y se le infiltró en la zona cervical. Las pruebas descartaron cualquier tipo de lesión grave, garantizando su presencia en el partido de cuartos de final ante Serbia que se disputará el miércoles. El jugador español tiene previsto coger un vuelo a las 11:50 de la mañana de hoy para poder llegar a tiempo a Estambul y entrenar con normalidad junto al resto de sus compañeros a las órdenes de Sergio Scariolo.

Después de la visita con el doctor Fabregat, Felipe se mostró aliviado y confiado de cara al futuro en declaraciones a la página web de la Federación Española. «Todo ha ido bien. El doctor me ha dicho que no era nada grave y ya me siento mucho mejor y con ganas de regresar a Estambul y estar junto a mis compañeros ante Serbia», señaló.

Uno de los que acogió con más alegría las noticias tranquilizadoras que llegaron desde Madrid fue el seleccionador Sergio Scariolo. La presencia del pívot cordobés ante la potente selección serbia se antoja fundamental para poder acceder a las semifinales.

En la selección, las sensaciones vuelven a ser de lo más positivas después de su irregular inicio de campeonato. La buena respuesta ofrecida por el grupo en el primer partido decisivo ha devuelto la confianza a los jugadores. El partido ante Grecia confirmó que España aspira a todo en el Mundial de Turquía.

Uno de los hombres más contentos tras el triunfo ante los helenos era Juan Carlos Navarro. El capitán español presentó su candidatura para ser escogido mejor jugador del torneo y meterse en el quinteto ideal con una actuación estelar. El de Sant Feliu respondió en los peores momentos asumiendo la responsabilidad y anotando puntos decisivos. Navarro, que acabó con 22 puntos siendo el máximo anotador del partido, seguro que ronda la mente de Dusan Ivkovic, seleccionador serbio, que contempla al de Sant Feliu como una de las grandes amenazas de España.

Ivkovic ha compuesto una selección muy joven, repleta de la tradicional calidad de la escuela balcánica y muy peligrosa, ya que muchos de sus jugadores atesoran una amplia experiencia en la NBA y en Europa a pesar de su juventud. El más veterano es Nenad Krstic, asentado desde hace años como jugador importante en todos los equipos de la liga norteamericana que ha militado. Con 27 años es el líder de un equipo algo irregular pero lleno de talento, ante el que Scariolo deberá despejar todas las dudas y encontrar la mejor manera de hacerle daño. Con Felipe y Navarro será más fácil.