OPINIÓN: BOJA en campaña

Los reglamentos. Qué razón tenía Romanones al señalar la fuerza electoral de las disposiciones administrativas. Ni Mercasevilla, ni los dispendios, ni las agresiones al ciudadano: la acción de campaña más importante de Juan Espadas la perpetró ayer el BOJA al conceder graciosamente un puesto de trabajo vitalicio a dos docenas de millares de enchufados. Muchos de los cuales, centralismo autonómico obliga, residen en Sevilla. En todas las capitales de provincia andaluzas alcanzará el PP una holgada mayoría absoluta. Tienen la esperanza de que no suceda lo mismo aquí, donde está censado el grueso de los «atrincones» junteros. Ya pueden desgañitarse los funcionarios por derecho, que con las cosas de comer no se juega. Veintitantosmil votos dan para mucho y buen marisco. Bien lo sabe el próximo aspirante a esclavo de Torrijos.