ANÁLISIS: Un duelo entre iguales por Arnaud Mercier

- ¿Qué candidato está mejor posicionado de cara al debate de hoy?
–No se puede subestimar a ninguno de los dos, ambos son buenos oradores. François Hollande, que hasta ahora se ha mostrado menos combativo para encarnar la cara opuesta del actual presidente, probablemente saque las garras. Sería un error por parte de Nicolas Sarkozy si acude confiado al estudio de televisión.

- ¿Cuáles son los puntos fuertes de Hollande y Sarkozy?
–Sarkozy está obligado a remontar la primera vuelta e intervendrá de un modo más agresivo. Pese a su talento retórico, el presidente-candidato se enfrenta a un duro rival que maneja una ironía mordaz con mucha habilidad. Hollande sabe poner de su lado a los espectadores, a los que arranca una carcajada. Sarkozy, por su parte, es muy difícil de desestabilizar. Como buen abogado, es un experto en negar lo obvio, rebotar un ataque para contrarrestar a su adversario. Pero esta vez tiene que defender una gestión de gobierno como presidente saliente ante un Hollande que va a repasar su quinquenio.

- ¿Va a ser decisivo el debate?
–Los indecisos pueden esperar a verlo para tomar su decisión. Aunque este fenómeno juega en los dos sentidos, ya que la lectura del debate no es unívoca. En las elecciones más ajustadas, los debates juegan un papel relevante.

Arnaud Mercier
Politólogo y profesor de la U. de Lorraine