Barcelona

Rafael Santandreu: «Ya había amargados antes de la crisis»

Con firma propiaProfesión: psicólogo. Nació: en 1969, en Barcelona. Por qué está aquí: es el autor del libro «El arte de no amargarse la vida» (Oniro).

«–Los miedos se superan no enfrentándose a ellos, sino percibiendo que no tienen razón de ser»
«–Los miedos se superan no enfrentándose a ellos, sino percibiendo que no tienen razón de ser»larazon

–«El arte de no amargarse la vida». Recéteme la norma esencial.
–Tener un buen diálogo interno, o sea, sano, objetivo y racional.

–¿La crisis está creando una legión de amargados?
–No. Ya existían antes, sólo que se quejaban de otras cosas.

–¿Qué nos amarga más la vida?
–Las necesidades inventadas, las que nos imponemos.

–El bombardeo constante de malas noticias causa aflicción, ¿no?
–Sí, intensifica la neurastenia de la gente. Pero no hay tantos abismos como nos anuncian.

–¿Nos amargamos la vida o nos la amargan?
–Nos la amargamos nosotros: el dueño de tu mente eres tú. Culpar a los otros forma parte de la neurosis.

–La clave parece estar en superar los miedos. ¿Cómo se hace eso?
–Los miedos se superan no enfrentándose a ellos, sino percibiendo que no tienen razón de ser.

–¿El miedo más común?
–El miedo a la soledad y al aburrimiento están muy extendidos y son los dos más absurdos.

–Creía que eran el miedo a perder el trabajo, a no poder pagar la hipoteca...
–Están ahí, y puede que sean más agudos que los por mí citados, pero hay más gente que tiene miedo a quedarse sin pareja que a perder el trabajo.

–¿Vivimos defraudados porque deseamos demasiadas cosas?
–Sí, tanto materiales como inmateriales: deseamos que nos respeten, que nos vean inteligentes, llevar una vida emocionante...

–¿El estoico, el que nada desea, tiene menos miedos?
–Más que el estoico, el que desea moderadamente. Con la comida y la bebida del día es suficiente para ser feliz.

–Dígame qué necesidades nos hacen infelices...
–Necesitar a alguien que nos ame y demasiada seguridad económica. Necesitar ser alguien y la aprobación de los demás.

–Nos creemos deprimidos con demasiada facilidad. ¿Debilidad mental?
–Somos más débiles que hace 25 años y mucho más que hace 50.

–¿Creemos que estamos peor de lo que en verdad estamos?
–Sí, es un hábito mental que viene dado por la «necesititis»: necesitar mucho.

–Dígame eso tan bonito de que el dinero no da la felicidad...
–Se lo digo. Hay estudios que lo demuestran. Pero si quiere comprobarlo, sólo tiene que viajar al llamado Tercer Mundo.

–Eso cuesta mucho dinero...