Ciudad Juárez

El narco mexicano declara la guerra a los ex drogadictos

Acribillan a 19 toxicómanos en un centro de rehabilitación de Chihuahua

Varios cadáveres yacen en el Centro de Rehabilitación Fe y Vida, en Chihuahua, donde al menos diecinueve personas fueron asesinadas y otras seis resultaron heridas.EFE/El Heraldo de Chihuahua-Organización Editorial Mexicana
Varios cadáveres yacen en el Centro de Rehabilitación Fe y Vida, en Chihuahua, donde al menos diecinueve personas fueron asesinadas y otras seis resultaron heridas.EFE/El Heraldo de Chihuahua-Organización Editorial Mexicanalarazon

Buenos Aires- Los narcotraficantes mexicanos se ensañan con especial violencia con los toxicómanos que intentan dejar el mundo de las drogas o alejarse de las mafias. Muchos de estos drogodependientes se encuentran en los centros de rehabilitación conmutando penas, sentenciados por haber trabajado para distintas bandas armadas. Ahora quieren mirar adelante, pero el pasado les persigue. Un comando de criminales armados con AK-47 asaltó un centro de rehabilitación de drogadictos en la ciudad norteña mexicana de Chihuahua y asesinó a 19 personas. Entraron a quemarropa por la noche, cuando todos dormían en el centro de rehabilitación «Fe y Vida» en la capital del estado del mismo nombre, a unos 350 kilómetros (210 millas) al sur de Ciudad Juárez, fronteriza con El Paso (Texas). El portavoz de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, Fidel Bañuelos, dijo que los atacantes dejaron mensajes en los que acusaron a las víctimas de ser delincuentes«Eso les pasa por violadores, asaltantes, escorias y marranos», se leía en cartulinas dejadas en el lugar. Además, un número indeterminado de otras personas fueron hospitalizadas con heridas de bala. Por su parte, la Presidencia mexicana informó en un comunicado que el presidente (de visita en Suráfrica), Felipe Calderón, condenó «enérgicamente los hechos», los cuales calificó de «indignantes».En los últimos meses se han registrado otros ataques atribuidos al narcotráfico a centros de rehabilitación en Chihuahua, el Estado mexicano con más asesinatos por parte del crimen organizado. En Ciudad Juárez, unos pistoleros atacaron el 2 de septiembre de 2009 un centro para adictos en el que murieron 18 personas y unos días después, el 15 de septiembre, irrumpieron en otro y asesinaron a 10 personas.Por su parte, el joven mexicano Sergio Adrián Hernández Güereca, de 14 años, muerto el lunes en Ciudad Juárez por un balazo disparado por un agente de la patrulla fronteriza estadounidense, fue enterrado ayer entre gritos de dolor y exigencias de justicia. El cortejo fúnebre partió de la vivienda de los padres de Sergio Adrián e hizo una parada en una iglesia, en donde la hermana mayor de Sergio se desmayó y tuvo que ser atendida por familiares. La Casa Blanca expresó también su pesar por la muerte del joven.