El Papa invitará a los jóvenes a una «macrofiesta» de fe

"Es un gran encuentro de jóvenes de todo el mundo en torno al Vicario de Cristo". Esto decía en 1985 al Colegio Cardenalicio el papa Juan Pablo II, que promovió la celebración de estos encuentros multitudinarios que son las Jornadas Mundiales de la Juventud, y que ha sido elegido patrono de la XII edición.

Entre el 16 y el 21 de agosto Madrid será el escenario de estas Jornadas, que pretenden "dar a conocer a todos los jóvenes del mundo el mensaje de Cristo", según proclama la Guía del Peregrino de la JMJ Madrid 2011.

Es, por tanto, una iniciativa evangelizadora de la Iglesia, dirigida a cualquier joven del mundo, sea o no católico, porque, a pesar de la evidente identidad católica del encuentro, está abierto a "todos los jóvenes de buena voluntad que deseen hacer una experiencia en su vida personal de amor de Dios por medio de su Hijo Jesucristo, de la caridad fraterna y la solicitud de los más necesitados", ha destacado el comité organizador.

Frente a quienes piensan que la figura central de este encuentro es el Sumo Pontífice, Benedicto XVI señalaba en un discurso a la Curia, del 22 de diciembre de 2008, que "el protagonista de las Jornadas no es el Papa, sino el propio Cristo".

Estar presente en la sociedad
Cada Jornada Mundial de la Juventud, celebradas anteriormente en Colonia, Roma, Sidney, Manila, París, Santiago de Compostela o Toronto, entre otras ciudades, es una gran "fiesta"con la que la Iglesia, ha insistido el comité organizador de Madrid, cumple con su misión de estar presente en la sociedad.

Su origen se remonta a 1984, cuando durante el llamado Año Santo de la Redención, en torno a 300.000 jóvenes de todo el mundo acudieron al Vaticano, a la Plaza de San Pedro, a la vigilia del Domingo de Ramos, convocados por Juan Pablo II para celebrar el Jubileo Internacional de la Juventud.

Al año siguiente, 1985, proclamado Año Internacional de la Juventud por la ONU, Juan Pablo II convocó de nuevo a los jóvenes en Roma para celebrar la vigilia, también el Domingo de Ramos, en la que participaron alrededor de 350.000 jóvenes. Fue tal el éxito de ambos encuentros que Juan Pablo II decidió instituir, en diciembre de ese año, la I Jornada Mundial de la Juventud, que tuvo lugar en Roma en marzo de 1986.

Desde entonces, ya se han celebrado once. Este año tiene lugar en Madrid la número doce bajo el lema "Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe", con el que se persigue, según explican los obispos españoles en la Guía del Peregrino, animar a los jóvenes a "fortalecer y edificar"su fe, a "profundizar las raíces en Cristo"y "edificar"su futuro a través del estudio, la profesión y el trabajo que, pese a las dificultades, "luchan por conseguir".

Una vigilia de oración de los jóvenes con el Papa será, de nuevo, el acto principal. Será el sábado 20 de agosto por la noche en el aeródromo de Cuatro Vientos, en la periferia de Madrid, el mismo lugar en el que, en mayo de 2003, Juan Pablo II celebró un encuentro con decenas de miles de jóvenes españoles. Aparte de esta vigilia, desde el lunes 15 de agosto la ciudad acogerá otras muchas actividades pastorales y culturales en torno a la fe católica.

Habrá catequesis en multitud de lenguas, a cargo de obispos de todo el mundo, un macro Vía Crucis en el Paseo de la Castellana y una gran fiesta del perdón en el parque del Retiro. También una adoración del Santísimo ininterrumpida en el Seminario de Madrid y una feria de vocaciones, en la que diferentes congregaciones explicarán sus señas de identidad y su misión.

Agenda cultural
Además, una intensa agenda cultural permitirá a los peregrinos la visita a los principales museos de la capital, que exhibirán exposiciones de temática religiosa o su asistencia al cine y al teatro. En total, hay programadas unas 300 actividades culturales.

La identidad visual de la JMJ 2011 es un logo en el que una corona bajo una cruz simboliza la corona de la Virgen de la Almudena, patrona de Madrid, y a los jóvenes de todo el mundo que unen al pie de la cruz para celebrar su fe junto al Papa. La M que dibuja la corona es la M de María, y también la M de Madrid.

También estarán en Madrid, como en el resto de Jornadas celebradas hasta ahora, la Cruz de los jóvenes y el icono de María, que Juan Pablo II regaló a los jóvenes en 1984 y 2003, respectivamente, para que las llevaran en peregrinación por todo el mundo.

Desde 1992, la Cruz ha estado en Australia, Canadá, Alemania y, junto con el icono, ha llegado a Asia, África y diferentes países europeos. Desde 2009 ha viajado por toda la geografía española.