No hubo «chim pum» (72-81)

Del «Que nos vamos a Estambul, chim pum, a Estambul, chim pum, a Estambul, chim pum» al «Cariño, te aviso, nos vamos a Treviso» han pasado 19 años. En 1992, el Estu alcanzó la «Final Four» de la Euroliga; en 2011 los colegiales se han quedado a las puertas de los cuatro mejores en la Eurocopa. Todo el Estu creía en la remontada. Los nueve puntos que el Cedevita logró de botín en Zagreb no eran insalvables. El espíritu era el de aquel memorable partido ante el Maccabi que significó el pasaporte para Estambul. Vistalegre olía a tardes mágicas en Magariños o a noches inolvidables en el Palacio de Goya. Pero el reto le vino grande. Los croatas ofrecieron una absoluta sensación de control. Salvo en un ruidoso arranque (14-6, min 4), Estudiantes nunca estuvo cerca de la «Final Four». El Cajasol será el único representante español en Treviso. Los sevillanos sí fueron capaces de defender la ventaja de la ida (67-49) ante el Budivelnik ucranio (80-77).

Estudiantes soñó con el pase hasta que Wright se decidió a silenciar Vistalegre. Fue una pesadilla en la primera parte. Anotó 20 puntos y resultó indefendible. Sus puntos fueron suficientes para que los arreones locales se quedaran en nada al descanso (42-41).

Siempre por detrás
El Estu nunca fue capaz de mostrar que el levantar la eliminatoria era una posibilidad. No hubo un quinteto estable y ninguna de las pruebas de Casimiro ofreció fiabilidad. Enfrente, Alexander Petrovic siempre encontraba algún recurso. Vukusic tomó el relevo de Wright y anotó doce puntos en el tercer cuarto. Desde el empate a 49, los colegiales siempre vieron a los balcánicos por detrás. La apuesta del técnico estudiantil por el último producto de la factoría del Ramiro, Jaime Fernández, sonó a intento desesperado. Tampoco funcionó. El equipo entró en el último cuarto doce puntos abajo en la eliminatoria. Tenía que pasar algo distinto a lo que había sucedido en los treinta minutos anteriores y no fue así. Draper manejó el partido a su antojo y para despejar las dudas llegaron un par de triples de Petrovic (59-66, min 34). A la desesperada, Estudiantes buscó sacar partido del caos, pero los croatas no se alteraron (70-72, min 36). En Treviso, el Cajasol estará solo.