ANÁLISIS: Aumentará la participación por Romain Pasquier

- ¿Hasta qué punto influye un debate televisivo en una segunda vuelta en Francia?
–Los estudios que existen al respecto son contradictorios. Algunos dicen que un debate muy fuerte puede influir y otros dicen que no. En la historia de la V República, un debate que tuvo un gran efecto fue el de François Mitterrand y Valéry Giscard d'Estaing en 1974. Mitterrand debía vencer y tras el debate, Giscard d'Estaing se impuso claramente. Posteriormente, Mitterrand fue derrotado en las urnas. Sin embargo, en este momento, no tengo la impresión de que estos debates sean muy decisivos.

- ¿Cuál era la intención de Sarkozy al pedir tres debates?
–Nicolas Sarkozy sabía que François Hollande diría que no a los tres debates, pero así puede decir que tiene miedo de enfrentarse con él. Es una estrategia para impactar y obligar a Hollande a que responda. En definitiva, situarle entre la espada y la pared.

- ¿Cómo ve estas elecciones en Francia, considera que están muy polarizadas? ¿Podríamos decir que cada voto cuenta?
-Fue una sorpresa la movilización en la primera vuelta. Los estudios decían que esta campaña no interesaba mucho a los franceses y por eso fue una sorpresa. La movilización va a crecer hasta la segunda vuelta, porque es una flexión clásica en las elecciones presidenciales en Francia. Ahora que hay un duelo muy fuerte con dos personalidades bastante carismáticas, eso hará que la movilización de los ciudadanos se incremente.

- ¿Cree que François Bayrou tendrá alguna influencia en esta segunda vuelta?
–Van a intentar seducir a este electorado centrista, pero creo que están en una situación más complicada que en 2007 porque Bayrou tiene menos votos, un 9,13% en este caso, y no puede influir mucho con su resultado. Además, los estudios muestran que la mitad del voto de su electorado apoyará a Hollande y la otra mitad, a Sarkozy. Por lo tanto, su capacidad de influir en la segunda vuelta es limitada y hasta ahora muy silenciosa.

Romain Pasquier
Director de Investigación del CNRS en Rennes