Mc Laren Honda

Alonso ya piensa en 2011

Ferrari y el piloto aprovechan la derrota para salir fortalecidos n En Italia exculpan al español y exigen cambios en la cúpula directiva 

La Razón
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«Esta mañana ha sido duro despertarse, no lo voy a negar». Con esas palabras empezaba Fernando Alonso sus primeras declaraciones un día después de sufrir uno de sus momentos más amargos en la Fórmula Uno. Sin duda, ha sido una campaña durísima en todos los aspectos, tanto a nivel colectivo como en el personal. El aterrizaje en una escudería como Ferrari, con todas las complicaciones que conlleva un sitio tan «especial», no resultó una labor fácil y, además, el ansia de querer luchar con los mejores subido a un monoplaza claramente inferior llevó a Fernando a cometer errores impropios de él en siete años en la élite.

Es la segunda vez que pierde un título que tenía en el bolsillo y eso es un duro varapalo. En McLaren el engreimiento y la estupidez de Ron Dennis le impidieron sumar el tercer título, y el domingo un error de sus hombres de confianza, Andrea Stella y Chris Dyer, le llevaron al desastre. En Italia las reacciones no se han hecho esperar, aunque declaraciones como las de Roberto Calderoli, ministro en el gobierno de Berlusconi, enseguida han tenido una fuerte e irónica respuesta de Montezemolo, del que el político pedía la dimisión: «Cuando el estadista Calderoli consiga en su vida el uno por ciento de lo que ha hecho Ferrari por este país, en términos de industria y deportes, entonces se merecerá una respuesta», indicó. Ferrari y Alonso han querido extraer aspectos positivos de este gran error que les ha costado una corona. Sin embargo, no sería sorprendente que cuando la situación se enfríe se produzcan cambios. El fallo de apreciación ocurrido el domingo no ha sido el único en las dos temporadas que la «Scuderia» ha vuelto a italianizarse en la cúpula de responsables. Errores como el de Malasia, cuando la lluvia les sorprendió en la clasificación y tiraron por la borda la carrera de Alonso, son cuestionables en este deporte. Y en 2010, jamás Ferrari se ha caracterizado por una buena estrategia o decisión clave. Más bien todo lo contrario. Siempre han ido a remolque, incluso en copiar las soluciones técnicas de Red Bull. La innovación de antaño ha dejado paso a la improvisación y eso en la F-1 se paga muy caro.

Alonso y Ferrari han aprovechado la ocasión para salir fortalecidos, pero la herida tardará en cerrarse. El español afirma sentirse a gusto y sin duda, ha estado muy por encima del rendimiento del equipo. En 2011 el reglamento no cambiará y eso supone un respiro para los creadores del monoplaza frente a las ideas revolucionarias de Adrian Newey en Red Bull, que siempre busca atajos en el reglamento.

 

CLAVES
- El F10 no ha sido un coche competitivo y ahora que tienen un año de experiencia, Alonso tendrá un monoplaza a la medida en 2011.
- La llegada de los neumáticos Pirelli supone un nuevo reto técnico. Todos tendrán que adaptar su conducción.
- Ferrari ya emplea un segundo túnel de viento en Alemania para el diseño de su nuevo monoplaza.
- Alonso trató de proteger a los responsables del error de Abu Dhabi, pero no es descartable que haya cambios en las próximas semanas.
- ¿Y Massa? Su papel ha sido lamentable y ni siquiera al final pudo colaborar con la escudería en el título de constructores.
- La reciente italianización del equipo no ha surtido efecto. Montezemolo busca de nuevo el equilibrio anglosajón.