Cataluña

El último fracaso por José Antonio VERA

La Razón
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Nadie dijo que esto iba a ser fácil, pero ayuda muy poco el no cumplimiento de las previsiones. Y en materia económica no paramos de tropezar, unas veces con el paro, otras con la deuda y ahora con el crecimiento y el déficit. El último fracaso reconocido es el que nos transmitió ayer el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa. La previsión de crecimiento del 1,3 para 2011 se viene abajo. Ya lo adelantaron los principales gabinetes de estudios y los más relevantes organismos europeos. Tal y como estaban las cosas en nuestro país, era muy complicado que se cumpliese esa previsión, pero el Gobierno se negó en todo momento a reconocerlo. La consecuencia es que ha habido que hacerlo ahora, de prisa y corriendo y a cuatro días de los comicios, cuando la capacidad de maniobra es nula. Con el agravante añadido de que el Ejecutivo que salga de las urnas se va a encontrar con una situación aún peor de la presupuestada: menos ingresos, menos actividad y más gastos que afrontar. A ese inconveniente habría que añadir que tampoco se va a cumplir la previsión de déficit público, que será previsiblemente del 6,6, seis décimas por encima de lo previsto para este año, principalmente porque la Generalidad de Cataluña no ha cumplido, doblando el objetivo previsto para las autonomías (2,6 frente al 1,3).

Ya he comentado en alguna ocasión que una de las cosas que más ha dañado a la economía española es el irresponsable retraso en la convocatoria de elecciones, posponiéndose durante meses la toma de una serie de medidas que resultan imprescindibles en la actual tesitura. El país necesita un Gobierno activo y que funcione, y para nada estos cuatro meses de campaña electoral que no han servido más que para agotar a los ciudadanos.