El juego de los chicos de Hollywood por Ana Locking

Me encanta descubrir el juego que se trae la generación de chicos de los Oscars de 2012 en cuanto a sus detalles. Todos vistieron estupendas pajaritas, elegantes «pocket square» (pañuelo de bolsillo de pecho), solapas de chaqueta con texturas, brillos y ribetes variados que aportaron dinamismo al clásico esmoquin. Y, sobre todo, ¡qué gusto da ver esas camisas perfectas, con pecheras semirígidas y adecuados «stud» de 4 botones postizos en forma de perla para la pechera. Nada que ver con el desfile de corbatas que vimos en los Goya. Empecemos por Gary Oldman, que lució un estupendo tres piezas, una pajarita bien anudada, unas gafas vintage, la solapa de chaqueta perfectamente ribeteada en marino y el detalle del pañuelo con lunares. Desfilar para Prada le ha mejorado el gusto. Brad Pitt estuvo correcto, pero sin carácter, porque, quizá, de eso ya tiene de sobra. Me decepcionó ver a Antonio Banderas sin pajarita. George Clooney destacó con un esmoquin de solapas en raso brillante en la parte baja de la chaqueta. Christopher Plummer sorprendió con una chaqueta de terciopelo azul y las solapas ribeteadas, un «look» muy peligroso en el 95% de los casos. Pero el suyo estuvo entre el 5% restante. Perfecto el esmoquin de Tom Ford para Colin Firth, sin nada especial que resaltar, pero clásicamente elegante. Jean Dujardin, quizá el mejor peinado de la noche, decepcionó con un traje demasiado convencional y aburrido.