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El PSOE reduce su apuesta federal a un nuevo Senado

Griñán arranca la revisión del reparto en la reducción del déficit

El presidente andaluz, José Antonio Griñán, ayer, durante la rueda de Prensa posterior a la Conferencia de Presidentes
El presidente andaluz, José Antonio Griñán, ayer, durante la rueda de Prensa posterior a la Conferencia de Presidenteslarazon

MADRID- «Todos contra el déficit». Ese podría ser el lema «cocinado» ayer entre Gobierno y Comunidades como mensaje ante Europa. Mariano Rajoy arranca el compromiso de las Autonomías con el Pacto de Estabilidad y a cambio se compromete, como querían los barones socialistas –en especial el andaluz, José Antonio Griñán– a revisar el reparto del objetivo de déficit entre Estado y Comunidades en 2014 para permitir las segundas tenga un margen de desvío superior al 0,1 por ciento previsto.

El acuerdo fue de mínimos, más político que efectivo, pero teniendo en cuenta el resultado de las dos últimas Conferencias de Presidentes que estuvieron marcadas ambas por la tensión entre PSOE PP, la de ayer podría calificarse de éxito. Triunfo que fue posible gracias a que todos antepusieron el sentido de Estado y la lealtad institucional a las diferencias políticas. Y no es poco dada la coyuntura económica y territorial. Hasta la intervención de Artur Mas, en la que en ningún momento asomó su hoja de ruta independentista ni mencionó el pacto fiscal, fue calificada de «responsable e impecable» por todos. «No ha hablado de soberanismo, ni de autodeterminación ni de nada de eso. Y tampoco nadie le ha hecho ningún reproche», afirmó Griñán en referencia al ya president en funciones de la Generalitat y satisfecho de que la cumbre no acabara en un duelo entre soberanistas y no soberanistas.

Hasta aquí las mieles porque en el cónclave hubo, cómo no, discrepancias pese a que los barones socialistas se felicitaran de la «imagen de unidad» que se traslada a Europa y el firme compromiso con el objetivo de déficit. Las desavenencias llegaron en el plazo fijado para la revisión del objetivo de déficit, que Rajoy fijó en 2014 y Griñán reclamó para el próximo ejercicio. ¿Quiere eso decir que Andalucía no cumplirá con el compromiso para 2013? «La ley es la ley y Andalucía siempre la cumple», espetó el andaluz.

También hubo roces en cuanto a la necesidad de impulsar un nuevo modelo de financiación autonómica. Y aquí el bloque socialista acabó dividido, ya que Andalucía reclamó una evaluación del sistema actual mientras que Asturias apostó por uno nuevo.

Andalucía se da por satisfecha porque el documento final prevé una fórmula intermedia para que sea un Comité Técnico de Evaluación quien analice la aplicación del actual modelo e informe de los resultados al Consejo de Política Fiscal y Financiera. Y también porque en el texto acordado se incluyó otra de sus reclamaciones: dejar constancia de que los problemas financieros de las Comunidades tienen su origen en la disminución de ingresos públicos y que ello invita a una reflexión sobre el sistema tributario. Griñán se marcha de Madrid además con un compromiso escrito para crear un grupo de trabajo que analice procedimientos que garanticen el mercado único en España y la evaluación de las políticas activas y pasivas de empleo.

 Y aunque en el cónclave el debate sobre el modelo de Estado no se puso sobre la mesa, Andalucía sí apostó, en aras de una mayor cooperación por un modelo federal cooperativo para el que, según verbalizó Griñán , sólo sería necesario modificar el Senado. También el lendakari en funciones, Patxi López, secundó esta idea. No dudó en apuntar que se siente «muy cómodo con la apuesta federal» de su partido y, al tiempo, instó a una reforma urgente del Senado para convertirlo en «una auténtica Cámara de representación territorial». Según López, esto sería, en el fondo, «federal», y lo convertiría en un órgano de «cooperación y corresponsabilidad» de las comunidades en la gobernanza de España.

Si bien López destacó que la Conferencia supone un «ejercicio de responsabilidad de todos», aprovechó para cargar contra las medidas del Gobierno, la «invasión de competencias vía decreto» y las políticas que «pasan por encima» del autogobierno». Se despachó a gusto.

Sólo tres socialistas y mal avenidos
Son tres los presidentes socialistas y ni entre ellos se ponen de acuerdo. Al menos, en lo que se refiere al modelo de financiación. Durante la reunión, Javier Fernández, presidente de Asturias, se mostró partidario de un nuevo modelo y aquí se topó con su compañero de partido, el andaluz José Antonio Griñán, quien, por el contrario, cree que es necesaria una evaluación del sistema vigente. El debate estaba servido.